La moda masculina se desmelena en Londres
cargando...
A pie de obra, Carl, con su chaleco de seguridad amarillo chillón, no da crédito a lo que ve: "Qué raros van vestidos todos estos". Y es que la indumentaria de los asistentes a la Semana de la Moda masculina de Londres se sale de lo ordinario.
Un joven con melena y zapatos de tacón amarillo lleva un top de color verde oliva y una mochila de estudiante. Saluda a un hipster, ataviado con traje de pantalón corto con lunares. Por detrás pasa otro apasionado de la moda, impecablemente tocado con un sombrero adornado con dos cerezas. Antes de asistir a uno de los 32 desfiles que figuran en la agenda, aficionados, compradores, periodistas especializados y blogueros exhiben sus mejores galas; todo está permitido en los cuatro días de la London Collections Men SS16.
"Yo antes también me vestía con pantalones tejanos y capucha. Pero eso se ha acabado. Ahora me esfuerzo cada día", cuenta Zokaya Kamara, de 35 años. Con pantalón corto, chaqueta y corbata, es uno de los muchos blogueros que rondan con cámara fotográfica en bandolera y teléfono de último grito en mano. "El hombre se viste cada vez mejor. Hoy ya no tiene miedo", opina tajante. La simple existencia de la London Collections Men confirma sus declaraciones. Antes no era más que un apéndice de la Fashion Week londinense. Desde 2012, el evento vuela por sí mismo. Y, para su séptima edición, lo ve todo en grande, con la presencia de 77 diseñadores y embajadores de lujo, como el piloto de fórmula 1, Lewis Hamilton.
"La semana se afirma cada vez más. Está bien porque hay competencia con París, Milán...", explica Paul Smith a la AFP a la salida del show de Craig Green, uno de los valores de la moda londinense. Dylan Jones, presidente de la London Collections, estima incluso que "el entusiasmo supera todas nuestras expectativas". Una efervescencia que da fe de un movimiendo de fondo: el interés de los hombres por la moda.
'Todo es más metrosexual'
"Asistimos a un cambio generacional. Los jóvenes de hoy se interesan mucho más por la moda que sus predecesores. Van de compras como las mujeres", afirma Jones a la AFP.
Una tendencia corroborada por las cifras. En 2014, la venta de ropa masculina generó 390.000 millones de euros de ingresos en el mundo, un 4,5 por ciento más que el año anterior. En comparación, las ventas de prendas femeninas se incrementaron un 3,7 por ciento hasta alcanzar los 587.000 millones.
"El mercado de la moda masculina crece más rápido que el femenino", subraya Tamaa Sender, analista de Mintel. Según este instituto de estudios de mercado, el 50 por ciento de los británicos de entre 16 y 24 años compraron al menos una prenda en los últimos tres meses de 2014.
A este ritmo ¿es posible que la moda masculina supere un día la femenina? "Yo creo que sí", asegura Payzee Mahmod, diseñadora independiente. "Los hombres se vuelven más expresivos, juegan con los colores y los cortes. Es gracioso ver cómo se salen de los caminos trillados". "Todo es más metrosexual", añade Jonas Oliver, experto en moda de Bond Magazine. Según él, los famosos dan ejemplo. "El mensaje es el siguiente: si usted tiene estilo, todo es posible".
"Antes, los hombres o eran completamente excéntricos, o se vestían con trajes negros. Hoy, se mezcla más, se exploran nuevos caminos", estima Geraint Donovan Bowen, al frente del blog "His name is fashion". Él también piensa que lo mejor está por llegar. "Se ha explorado a fondo la moda femenina, ya nada choca. En cambio con los hombres todo queda por hacer. Estoy seguro de que un día ya no se hablará de moda femenina ni de moda masculina, sino de moda". (AFP)