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Adidas eleva perspectivas tras el “impacto positivo” de la venta del stock de Yeezy

Por Jaime Martinez

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Diseño Adidas Yeezy 450 Resin. Créditos: Adidas.

Madrid – La multinacional europea de la moda deportiva Adidas, compañía líder y de referencia del sector, a escala global, ha dado a conocer los resultados preliminares de sus cuentas para el segundo trimestre de su actual ejercicio fiscal de 2023. Periodo de tres meses comprendido entre el 1 de abril al 30 de junio de este mismo año, durante el que la compañía alemana continuó experimentando una contracción de sus niveles de facturación, eso sí compensada con los buenos resultados recogidos fruto de su decisión de iniciar la venta del stock de artículos “muertos” que seguía atesorando en sus almacenes como parte de su, ya cancelada, asociación con la firma de moda Yeezy del controvertido músico y artista estadounidense Ye, antes conocido como Kanye West.

En base así pues a las informaciones hechas públicas desde la dirección de Adidas, la multinacional deportiva alcanzó a completar el segundo trimestre de su actual ejercicio fiscal generando ventas por valor de 5.343 millones de euros. Una cantidad que representa una caída de un -4,52 por ciento en comparación con los 5.596 millones de euros que la compañía alcanzaba a facturar durante el mismo periodo del pasado año; así como igualmente de un -3 por ciento, frente a los 5.509 millones de euros que la multinacional lograba facturar durante el mismo segundo trimestre de 2019, último ejercicio que se alcanzó a completar al margen de los efectos de la pandemia por coronavirus.

En otro orden de magnitudes, que se terminarán de perfilar en el próximo informe trimestral, definitivo, que la compañía contempla publicar a fecha del próximo 3 de agosto, se estima que durante este segundo trimestre del año el margen bruto de la compañía creció hasta el 50,9 por ciento, frente al 50,3 por ciento en el que se situaba hace un año. Mientras que el beneficio operativo habría alcanzado los 176 millones de euros, registrando una caída de un -55 por ciento frente a los 392 millones de euros registrados durante el mismo periodo de 2022.

Un revulsivo llamado Yeezy, para el problema provocado por Yeezy

Sosteniendo estos resultados, desde la misma dirección de Adidas no dudan a la hora de destacar el “impacto positivo” experimentado por los balances de la compañía tras la primera venta controlada del stock “muerto” que siguen atesorando en sus almacenes, fruto de la colaboración abierta, y polémicamente ya disuelta, con la firma de moda Yeezy del artista norteamericano antes conocido como Kanye West. Una decisión adoptada e implementada por la dirección de Adidas a finales del pasado mes de mayo, que, junto al comportamiento “mejor de lo esperado” del negocio propio de Adidas, han llevado a su dirección a tomar la decisión de elevar sus perspectivas económicas de cara al cierre de este mismo ejercicio de 2023. Un punto para el que además añaden que los resultados de sus balances podrían todavía mejorar “aún más”, para el caso en el que igualmente terminen funcionando con un éxito similar los “potenciales” futuros lanzamientos que puedan llegar a darse para tratar de seguir dando salida a los artículos de Yeezy producidos y almacenados por Adidas.

Partiendo de estas valoraciones, en términos financieros, tras el “éxito” en la comercialización de ese primer y reducido grupo de artículos, ahora los efectos de la posible cancelación de todo el inventario restante de Yeezy ha pasado a reducirse desde los 500 a los 400 millones de euros para las cuentas de Adidas, para el caso en el que se decidiese eliminar o donar el resto de los artículos de la línea Yeezy de Adidas todavía no comercializados. Previendo para estas mismas perspectivas unos costes relacionados con la revisión estratégica del negocio de Adidas que se mantienen sin cambios, en unos 200 millones de euros, pero contando con la perspectiva de cerrar este ejercicio de 2023 ahora con una pérdida operativa que reducen de los 700 a unos 450 millones de euros, y con unos ingresos que valorar que alcancen a contraerse en un rango de un dígito de valor medio, frente al valor alto con el que hasta ahora preveían llegar a completar el ejercicio. Una facturación con la que en cualquier caso contemplan que el beneficio antes de intereses e impuestos alcanzaría a situarse en niveles de equilibrio fiscal.

“La evolución de los resultados trimestrales de la compañía se vio impactada positivamente por la primera venta de parte del inventario de Yeezy, tal y como se anunció a finales del mes de mayor”, y a lo que se sumó el que “el negocio base de Adidas también se desarrolló un poco mejor de lo esperado”, explican desde la dirección de la multinacional deportiva europea. “En consecuencia, la compañía ha actualizado su guía para todo el año”, en línea con lo ya apuntado, y como base de una guía de previsiones para este 2023 sobre la que, advierten, “si tienen éxito, los posibles lanzamientos futuros de Yeezy mejorarían aún más los resultados de la empresa”.

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