Cumbre de las patronales de Iberoamérica sobre los retos del coronavirus para la región

Madrid – En el día de ayer tenía lugar en Madrid una cumbre que lograba reunir a 23 presidentes de las organizaciones empresariales de Iberoamérica. Acto que tenía lugar en la sede de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales CEOE en la capital de España, con el objetivo de analizar los nuevos retos que la pandemia por coronavirus ha planteado para toda la región. Representando el primer encuentro, al más alto nivel, que han mantenido las autoridades y organizaciones empresariales iberoamericanas desde el inicio de esta presente crisis; y al que acudían de manera presencial las autoridades españolas, y de forma telemática el resto de participantes.

Organizada por el CEIB (Consejo de empresarios iberoamericanos), la OIE (Organización internacional de empleadores) y por la SEGIB (Secretaría General Iberoamericana) bajo el título de “Más Iberoamérica, nuestra empresa común”, la cumbre vino presidida por parte de S.M. el Rey Felipe VI de España. Quien durante su intervención se encargó de destacar como ahora “necesitamos una Iberoamérica más unida, con mayor ambición; una Iberoamérica mucho más consciente de sus nexos y oportunidades como una de las grandes regiones del futuro, que está cimentada y sostenida por factores tan evidentes como nuestro capital humano -las generaciones más formadas de nuestra historia-, y ventajas como sus recursos naturales”. “Pero, sobre todo”, se encargaba de subrayar el Jefe del Estado español, “por una cultura compartida y un elemento fundamental que nos une: nuestras grandes lenguas afines, el español y el portugués”.

En cuanto a ese mismo carácter cultural y económico que singularizan las relaciones entre las distintas regiones que conforman Iberoamérica, Felipe VI se encargó de recordar que son y serán siempre muy fuertes. A lo que “ahora añado que lo deben ser más aún en situaciones de extrema dificultad como la que vivimos actualmente”, puntualizaba. “Creo que la experiencia acumulada por nuestras instituciones y profesionales durante los últimos meses os pueden ser de utilidad”, añadía en relación a los distintos tiempos con los que se está viviendo esta pandemia entre los distintos países iberoamericanos. Por ello, “como país hermano”, destacaba, “nos ponemos a vuestra disposición para colaborar en estos momentos tan complejos y dolorosos”.

Antes de terminar su intervención, S.M el Rey quiso incidir en la importancia de continuar destinando esfuerzos a la construcción de toda esta “gran obra” y a su “potenciación”, así como a la defensa de “una economía abierta, en la que los intercambios permitan a todos los agentes beneficiarse de la especialización internacional y de las cadenas globales de valor”. Lo que permitirá que los empresarios puedan seguir “realizando una labor fundamental en beneficio del conjunto de la sociedad, creando riqueza y generando puestos de trabajo en todos nuestros países”. “Quiero una vez más subrayar”, concluía Felipe VI, “nuestro empeño compartido de alcanzar, con el compromiso de todos, un espacio iberoamericano más prospero y cohesionado, más innovador y más sostenible e inclusivo”.

Avanzar hacia una Iberoamérica más cohesionada

Durante sus turnos de palabra, los distintos representantes empresariales analizaron las actuales prioridades de las empresas para salir fortalecidas tras esta crisis, así como sobre el papel que están representando sus distintas organizaciones en el objetivo común de “reforzar e impulsar Iberoamérica” ante estos momentos de dificultad. Coincidiendo los intervinientes en que “es momento de unir fuerzas y emprender una cruzada por la inversión promovida desde el más alto nivel”, para lograr avanzar en la salida de la crisis.

“Han surgido oportunidades para la digitalización, la innovación, para las inversiones en investigación, ciencia y tecnología, para los encadenamientos productivos y el acceso a nuevos mercados”, se encargaba de apuntar Erol Kiresepi, presidente de la OIE. Gerard Cadena, presidente de la CEA, aseguraba por su parte que “la cooperación, la innovación abierta y toda la arquitectura multilateral tiene que salir reforzada”; “en otras palabras”, resumía, “Iberoamérica debe salir reforzada”. Mientras que Rebeca Grynspan, secretaria general iberoamericana, destacaba la importancia del “liderazgo comprometido y el diálogo social” en estos momentos difíciles, aprovechando igualmente para lanzar un llamamiento a realizar “un nuevo pacto social que sirva no solo para salir de esta de crisis, sino también para ingresar a un futuro más prometedor, justo y resiliente”.

Por su parte Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, se encargó de agradecerle a S.M. el Rey su participación en la cumbre. Asistencia que “pone de manifiesto”, en palabras de Garamendi, “el decidido apoyo a la estratégica relación de nuestros países y de sus empresas, ayudando siempre a tender puentes entre las economías y las culturas”.

Además de S.M. Felipe VI, por parte española participaron del encuentro la secretaria general Iberoamericana, Rebeca Grynspan; la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi; el presidente de la Organización Internacional de Empleadores (OIE), Erol Kiresepi; y el presidente del Consejo de Empresarios Iberoamericanos (CEIB) y de la Confederación Empresarial Andorrana (CEA), Gerard Cadena. Mientras que en representación de las organizaciones empresariales miembros de CEIB-OIE, lo estuvieron los de las patronales de Andorra (CEA), Gerard Cadena; Argentina (UIA), Miguel A. Acevedo; Bolivia (CEPB), Luis Fernando Barbery; Chile (CPC), Juan Sutil; Colombia (ANDI), Bruce Mac Master; Costa Rica (UCCAEP), Álvaro Sáenz; Ecuador (CIG y CIP), Caterina Costa y Pablo Zambrano; El Salvador (ANEP), Javier Ernesto Siman; España (CEOE), Antonio Garamendi; Guatemala (CACIF), Nils Leporowski; Honduras (COHEP), Juan Carlos Sakaffi; México (COPARMEX y CONCAMIN), Gustavo de Hoyos y Francisco Cervantes; Nicaragua (COSEP), José Adán; Panamá (CONEP), Julio de Lastra; Paraguay (FEPRINCO), Gustavo Volpe; Perú (CONFIEP), María Isabel León de Céspedes; Portugal (CIP), Antonio Saraiva; República Dominicana(COPARDOM), Juan Alfredo de la Cruz; Uruguay (CNCS y CIU), Julio Lestido y Gabriel Murara; y por Venezuela (FEDECÁMARAS) Ricardo Cusanno.

Photo Credits: Casa de S.M. el Rey.