H&M funda Syre: una nueva empresa especializada en poliéster reciclado de textil a textil
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Madrid – Desde la multinacional de la moda sueca el Grupo H&M, acaban de anunciar su asociación con Vargas Holding y TPG en la fundación de Syre; una nueva empresa de naturaleza circular, desde la que se buscará escalar en la producción de poliéster reciclado obtenido a partir de un proceso de reciclaje de textil a textil. Unas fibras con las que desde Syre tratarán de impulsar la transición dentro del ecosistema de la moda hacia un modelo más plenamente circular, y en circuito cerrado, mediante la producción a gran escala de un material reciclado que deberá servir como sustituto más sostenible tanto de las fibras de poliéster virgen, como de las obtenidas a partir de botellas PET recicladas.
La noticia, hecha pública hace solamente unos minutos, se descubre como la respuesta que desde la multinacional de la moda sueca parecen haberse decidido a dar a las alegaciones que en su contra se lanzaron a finales de 2022, y desde las que se acusaba a la compañía de “greenwashing” por presentar como más sostenibles las prendas de su colección “H&M Conscious Choice”. Unas declaraciones que le valieron la interposición en su contra de varias demandas colectivas por “greenwashing” en los Estados Unidos, desde las que, como principal argumento, se alegaba el que las fibras textiles realizadas a partir del reciclaje de botellas PET, y utilizadas por H&M —al igual que por una amplia variedad de empresas del sector—, presentan una serie de contraindicaciones, en materia especialmente de durabilidad y relacionadas con su mismo proceso de reciclaje, que, lejos de hacerlas más sostenibles, las convierten en igualmente contaminantes, entre otras cuestiones, primero, por servir de materia prima para la confección de prendas de una menor durabilidad, y segundo, por impedir el que las mismas botellas puedan ser reutilizadas, y de una manera más óptima, por parte de las propias empresas especializadas en fabricación de envases.
A pesar de estos argumentos, cierto es que, hasta donde tenemos constancia, todas las demandas interpuestas por “greenwashing” contra el Grupo H&M por estos, o similares, motivos en los Estados Unidos han sido archivadas. Una cuestión que, a la vista de los hechos está, no ha impedido a la dirección de la multinacional de la moda sueca tomar buena nota de esas impresiones, hasta el punto de decidirse a impulsar la fundación de Syre. Una nueva aventura en materia de circularidad en la que la multinacional de la moda sueca se embarcó hace ya más de un año, pero que finalmente se han decidido a presentar ahora, justamente, y tampoco podemos dejar de obviarlo, escasamente una semana después de que la compañía circular Renewcell, participada por H&M, terminase declarándose en quiebra, poniendo así punto y final —al menos por el momento— a sus operaciones, ya además a escala industrial, de producción de fibra textil Circulose, obtenida a partir, y en su 100 por cien, de desechos textiles celulósicos.
Una nueva aventura empresarial circular, junto a Vargas Holding y TPG
Poniendo así pues ahora el acento, ya no en el reciclaje de esos residuos textiles de base celulósica, como los residuos de algodón, sino en el de los más contaminantes residuos textiles de poliéster, es como llegamos hasta esta nueva empresa, en su sentido más amplio, de Syre. Compañía que ha fundado el Grupo H&M; junto a la firma sueca de inversión Vargas Holding, especializada en un modelo de inversión “desde cero” en empresas con el potencial de generar un impacto positivo sobre el entorno, modelo que ya han desarrollado financiando la constitución y el desarrollo de empresas especializadas en baterías verdes, acero e hidrógeno como Northvolt, Polarium, H2 Green Steel y Aira; y del fondo de inversiones TPG Rise Climate, el brazo inversor en acciones climáticas de impacto de la firma de capital riesgo estadounidense TPG. Compañías las tres que van a participar en calidad de principales inversores y de socios fundadores de Syre, asegurando así con ello, y desde el minuto uno, las fuentes de financiación necesarias para el desarrollo y el escalado de la empresa, causa que fue la que precisamente terminó por conducir a la bancarrota a Renewcell.
Tras la constitución de la nueva empresa, desde Syre ya han arrancado con la construcción de su primera planta para la producción a escala de sus fibras de poliéster reciclado de textil a textil. Un primer centro de producción que se confía en que pueda terminar de abrir sus puertas este mismo 2024 en Carolina del Norte (Estados Unidos), como el primero de las hasta 12 plantas de producción que desde Syre contemplan llegar a poner en marcha a lo largo de estos próximos 10 años, para la producción de más de tres millones de toneladas métricas de poliéster reciclado. Unas fibras que deberán servir para sustituir buena parte del poliéster virgen y del poliéster reciclado de botellas PET que actualmente se utiliza dentro de la industria de la moda y del textil, y para las que además desde el Grupo H&M ya han comprometido un acuerdo de compra por un valor total de 600 millones de dólares, para un plazo de siete años. Un acuerdo que servirá así para adquirir una ingente cantidad de poliéster reciclado de textil a textil, con el que el Grupo H&M cubrirá buena parte de la demanda que va a requerir para seguir avanzando en sus objetivos de sostenibilidad a largo plazo, y que pasan por lograr que el 30 por ciento de los materiales que se emplean para la fabricación de sus colecciones sean reciclados para 2025, y el 100 por cien sean reciclados u obtenidos a partir de procesos más sostenibles, para 20230. Un porcentaje para el que ahora se han decidido a fijar el que, de ese 100 por cien, al menos el 50 por cien deberá responder a la categoría de fibras recicladas, como las de este poliéster reciclado de textil a textil de Syre. Unas fibras que, defienden, cuentan con una calidad equiparable a la del poliéster virgen, pero con un rendimiento superior en términos de sostenibilidad, siendo capaz de reducir en hasta un -85 por ciento las emisiones de CO2 durante su proceso de fabricación.
“Syre marca el inicio del gran cambio en el textil”, enfatiza Dennis Nobelius, director ejecutivo de Syre, a lo largo de unas declaraciones hechas públicas por la misma compañía circular. Desde esta nueva empresa cofundada por el grupo H&M, “imaginamos un mundo donde cada fibra textil vea un nuevo día”, defiende. Y es que “con la implementación de un verdadero proceso de reciclaje de textil a textil a una hiperescala, queremos” justamente “impulsar la transición desde una cadena de valor lineal a una circular, mediante el aprovechamiento de los desechos textiles, una y otra vez”.
“Después de haber creado y escalado empresas que permiten la transición verde en todo el conjunto de la industria, estoy muy emocionada de ser parte de la fundación de Syre”, añade por lado Susanna Campbell, presidenta de la junta y cofundadora de Syre. “Como solución ‘plug and play’ para la actual cadena de valor del textil, Syre será clave para permitir el cumplimiento de ambiciosos objetivos de sostenibilidad para todas las industrias con un uso intensivo de poliéster, como la confección, la automoción y el interiorismo”.
“La nueva empresa Syre es un siguiente paso importante en el viaje del Grupo H&M para integrar la circularidad en todo nuestro negocio”, no ha dudado en querer salir a poner en contexto por su parte Daniel Ervér, nuevo presidente y director ejecutivo del Grupo H&M desde el pasado 31 de enero. Con la puesta en marcha de “esta solución dirigida a escalar rápidamente en el reciclaje de textil a textil”, apostilla Ervér, “queremos seguir impulsando e inspirando a más actores de la industria a unirse a nosotros, para cerrar el círculo y acelerar el cambio hacia un futuro más sostenible”.