Inés Bonicelli: “Buscamos que la lana uruguaya se valore en el mundo”

Buenos Aires – Uruguay XXI es la agencia de promoción de exportaciones e inversiones de Uruguay. Tuvimos la oportunidad de conversar con Inés Bonicelli, Vicedirectora Ejecutiva del organismo sobre cómo están trabajando junto a la industria de moda local para que las marcas puedan exportar; las oportunidades que está teniendo el sector a partir del impacto de la pandemia y el proyecto Uruguay Wools, con el que buscan posicionar la lana uruguaya en el mundo.

¿Qué trabajo hacen en Uruguay XXI junto a la industria de moda local?

Lo que hacemos en Uruguay XXI es ver cómo podemos apoyar a las empresas uruguayas para que exporten. Con respecto a temas de moda, hay diferentes formas y niveles de apoyo, que pueden ser a través de gestiones a la industria lanera, por ejemplo, y también, por otro lado, ayudar al pequeño artesano o diseñador para que exporte. Uruguay XXI venía haciendo el trabajo de ir identificando las empresas de diseñadores uruguayos con un nivel de desarrollo óptimo para exportar, a ellos se les ha dado apoyo para que participen en ferias en el exterior.

¿Cómo fue la tarea con el sector este año?

Este año, que no hubo ferias empezamos a pensar en nuevas formas de apoyo a la industria. El 2020 fue atípico para todos por el Covid-19 y nosotros además cambiamos las autoridades porque asumió un nuevo gobierno. Se presentaron muchos desafíos, pero también hubo oportunidades. Nos reunimos con la Cámara de Diseño y con la Cámara de la Vestimenta y, contra todos los pronósticos, nos contaron que tuvieron un año bueno porque al cerrarse la exportación de China durante varios meses, los diseñadores tuvieron que mirar hacia adentro y rescatar recursos que había acá. Al sustituirse la producción nacional por la importación, los talleres fueron cerrando y se fueron perdiendo los oficios a los que esta vez hubo que recurrir. Seguramente es un poquito más caro que producir en China, pero tiene otras ventajas, fundamentalmente la cercanía y además no se corre el riesgo de que venga otra enfermedad o que alguna otra cuestión totalmente ajena impacte en el negocio.

¿Y, qué otras cosas observaron?

Con respecto a los productos de más alto nivel o más sofisticados, siempre la principal competencia es la gente que viaja y compra en el exterior. Este año la gente no pudo viajar y se dieron dos fenómenos: la decisión consciente de apoyar al diseño nacional y la imposibilidad objetivo de poder viajar y comprar afuera. Creo que los diseñadores se dieron cuenta de todo esto y lo capitalizaron para construir lealtad y marca, además de desarrollar un vínculo con sus clientes. Y, otra tendencia que se dio, un poco por obligación, es que se tuvo que recurrir al e-commerce. Muchas compañías que no tenían páginas web tuvieron que desarrollarlas en estos meses y muchos diseñadores empezaron a poner el foco en las posibilidades que da el e-commerce y su visibilidad en el exterior. Y ahí, Uruguay XXI también tiene un rol importante porque exportar de a paquetes no es tan sencillo, así que asistimos a las pequeñas y micro empresas en los procesos de exportación.

La industria lanera es muy importante para el país, ¿Cómo es ese vínculo de trabajo?

La lana es un producto que puede traerle a Uruguay una oportunidad para lograr un mejor posicionamiento. Hay que trabajar en una estrategia para que en el mundo se conozca la lana uruguaya por cómo se produce, por cómo se cría la oveja y por cómo se esquila. Uruguay es uno de los cuatro países productores de tops de lana del mundo junto a República Checa, China y Argentina. En el país hay cuatro empresas productoras de tops de lana, las cuatro trabajan con energías renovables y reciclan el agua. Los esquiladores uruguayos son reconocidos en el mundo y además está el tema del bienestar animal, que es algo que al consumidor le importa cada vez más.

¿De qué se trata Uruguay Wools?

Uruguay cumple con todas las condiciones de calidad y estamos trabajando en contar todo esto a través de Uruguay Wools. Por ahora armamos toda la estrategia en el marco de este año difícil y el próximo paso es promocionarlo. La idea es que dentro de Uruguay Wools estén las empresas que cumplan con ciertos requisitos de calidad, dependiendo en que eslabón de la cadena de producción estén. Nos interesa que sea parte tanto el que exporta lana sucia, como el que exporta lana lavada y peinada, o el diseñador que exporta un producto tejido. La lana uruguaya está entre las mejores y buscamos que eso se valore en el mundo.

¿Qué viene para el sector de moda?

Tenemos un gran desafío porque la industria textil en Uruguay se fue muriendo en los años 80 y 90 y Uruguay hoy es bastante poco competitivo a nivel industrial y la forma de subsistir es posicionarte en nichos en los que la forma de producir es más cara, pero es sustentable, con energías renovables, equidad y comercio justo. Poder hacer todo esto y poder contarlo es nuestra apuesta a que se pueda producir y exportar diseño uruguayo con valor agregado nacional. Muchos diseñadores uruguayos ya tienen todo esto incorporado y nosotros como marca país queremos apoyarlo.

Fotos y video: Inés Bonicelli, Uruguay XXI