José María Castellano: así evolucionó Inditex bajo la dirección de la primera “mano derecha” de Amancio Ortega
Madrid – En la madrugada de este pasado miércoles 17 de septiembre fallecía en Madrid, a sus 78 años, el ejecutivo, empresario e inversor José María Castellano (La Coruña, 1947-2025). A día de hoy una figura tan alejada como clave dentro del histórico de Inditex, multinacional de la moda española de la que llegó a desempeñarse como su primer consejero delegado, trabajando mano a mano con su fundador y máximo accionista, Amancio Ortega, en la constitución de los cimientos de la gran compañía global que es hoy el grupo de modas gallego.
Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid, catedrático de Economía financiera y contabilidad en la Universidad de La Coruña, y miembro de la Academia de Ciencias Económicas y Financieras, José María Castellano se incorporaba en el año 1985 al Consejo de Administración de un recientemente constituido, aquel mismo preciso año, grupo Inditex. El gran proyecto empresarial al que se decidió por entonces a empezar a dar forma Amancio Ortega, reuniendo bajo su paraguas de holding a la sociedad Confecciones GOA (acrónimo de “Go Amancio”), fundada hacia el año 1963 junto a su primera esposa, Rosalía Mera, y de cuya mano había empezado a consolidar su trayectoria dentro de la industria del textil a través de la confección de prendas para terceros; así como al resto de compañías que para entonces ya había terminado de constituir, entre ellas Zara. La gran apuesta de Amancio Ortega en su salto del canal B2B (Confecciones GOA) al B2C (Zara), y que, tras la apertura de su primera tienda en el año 1975 en la calle Juan Flórez de La Coruña, había llegado a protagonizar un tan rápido como fulgurante crecimiento, que Ortega se marcó como propósito el de tratar de seguir escalando, ya desde su integración dentro de Inditex.
De miembro del Consejo de Administración, Castellano pasaría a ser nombrado vicepresidente y primer consejero delegado del grupo Inditex en 1997. Fecha que marcaría el arranque de una etapa especialmente vibrante dentro del grupo de modas gallero, que entraba a quedar liderado por el tándem formado por Amancio Ortega, presidente de Inditex, y por José María Castellano, vicepresidente y CEO. Una posición esta en la que Castellano cesó para entrar a ocupar la de vicepresidente no ejecutivo, tras el fichaje, anunciado en mayo de 2005, de Pablo Isla, por entonces presidente de la tabaquera Altadis, como nuevo consejero delegado de Inditex. Una entrada que debía de llegar para terminar de dar paso a una suerte de triunvirato en el grupo de modas gallego, con Amancio Ortega como presidente, Castellano como vicepresidente y consejero, e Isla como consejero delegado, pero que finalmente no terminaría de instaurarse, tras la abrupta salida de quien por 20 años se mantuviera como mano derecha del fundador de Inditex. Una salida que se ejecutaría con la dimisión de Castellano el 22 de septiembre de 2005 —escasamente unas pocas semanas después de la confirmación de Pablo Isla como consejero delegado del grupo durante su última junta general de accionistas— de todos sus cargos en Inditex, en la que entonces se mantenía como vicepresidente y miembro de su Consejo de Administración. Una dimisión que pillaba por sorpresa al mundo empresarial y económico de la época, y que fue atribuida a un duro desencuentro entre Ortega y Castellano, en el marco del frustrado proceso de adquisición del 22 por ciento de Unión Fenosa que había puesto a la venta entonces el banco Santander; un paquete de su capital con el que, junto a un grupo de empresarios gallegos, aspiraba a hacerse Ortega, a través de una operación que se había encargado de pilotar el mismo Castellano, pero que no llegó a salir adelante.
Tras su salida de Inditex, y habida cuenta de su más que exitoso desempeño al frente de la por entonces ya multinacional de la moda española, se apuntó al próximo nombramiento de Castellano como pieza clave en el Grupo FCC de Esther Koplowitz, en el que estaba llamado a sustituir a Rafael Martínez-Ynzenga como nuevo presidente de su compañía filial Cementos Portland Valderrivas. Un movimiento que no llegó a fraguarse, y para el que ya en enero de 2006 la compañía constructora anunció que no habían alcanzado ninguna clase de acuerdo para la entrada en el grupo del exconsejero delegado de Inditex. Un José María Castellano que regresaría a la primera fila de la esfera económica del país con su designación en 2008 como nuevo presidente de la compañía española de telecomunicaciones ONO. Un cargo que desempeñaría hasta la adquisición de la compañía por Vodafone en 2014, compaginándolo, entre 2009 a 2011 con el de vicepresidente de La Voz de Galicia, y entre 2011 y hasta 2014 con el de la presidencia ejecutiva de Novagalicia Banco. La entidad financiera creada tras la reestructuración de las cajas de ahorro gallegas, Caixa Galicia y Caixanova, tras la crisis financiera de 2008, y que se encargó de liderar Castellano hasta su adquisición por Abanca en 2014.
Finalizada esta etapa marcada por su desempeño como presidente de ONO y presidente ejecutivo de Novagalicia Banco, Castellano siguió participando como miembro de diferentes consejos de administración, como el de Puig, Esprit o Bimba y Lola, del que entró a formar parte como consejero independiente, tras la constitución de su primer consejo de administración en enero de 2020. Una participación y presencia que mantuvo hasta el pasado marzo de este mismo 2025, y que desempeñó al tiempo que ejercía sus funciones como presidente no ejecutivo de la compañía gallega dedicada a la producción de energía renovable Greenalia. Una sociedad en la que contaba, desde junio de 2020, con el 6 por ciento de su capital social, y desde la que continuaba vinculado al mundo de la moda y del textil, a través de la “joint venture” creada junto a la compañía portuguesa Altri, denominada Greenfiber, para impulsar la construcción en Galicia de la controvertida planta de producción de fibras sostenibles “Proyecto Gama”.
De compañía privada, a multinacional de la moda con ventas por 6.740 millones de euros
Poniendo ya el foco de atención a la brillante, y fundamental, labor que Castellano llegó a desempeñar al frente de Inditex, antes de su designación en 1997 como vicepresidente y consejero delegado, además de ejercer como consejero del Consejo de Administración desde 1985, también asumió distintas responsabilidades en áreas estratégicas y críticas de la compañía. Unas tareas para las que, aún sin título ejecutivo formal, terminaría por participar como mano derecha de Amancio Ortega en la constitución de los cimientos de esa incipiente Inditex, que, con Zara como principal estandarte, fue dando paso a un estudiado proceso de crecimiento y de diversificación, que arrancó en 1991. Un año en el que Inditex empezó a perfilar su cartera, con la adquisición, por 2 000 millones de pesetas de la época, del 36,72 por ciento en manos de Cofir de Massimo Dutti, firma fundada en Barcelona en 1985 por el empresario y emprendedor madrileño Armando Lasauca. Una operación a la que siguió, aquel mismo año, el lanzamiento de Pull&Bear, la primera firma de moda joven, y también la primera marca nativa que lanzó la compañía al mercado; y la compra en 1995 del 100 por cien del capital social de Massimo Dutti.
Ya tras el nombramiento de Castellano en 1997 como vicepresidente y consejero delegado de Inditex, la compañía española continuó adelante en ese estudiado proceso de diversificación comercial, y de públicos, con el lanzamiento de Bershka en 1998; la adquisición del 90 por ciento de Stradivarius, firma fundada en 1994 por la familia catalana Triquell, en 1999 —la compra del 100 por cien se completaría en 2005—; y con el lanzamiento de Oysho, entonces como la firma de moda íntima del grupo, en el año 2001, de manos de Sergio Bucher, quien se incorporó a Inditex en el año 2000 procedente de las filas del Grupo Cortefiel, y de su cadena Women’secret, con el objetivo específico de crear la firma de íntimo del grupo fundado por Amancio Ortega. Compañía a la que Castellano se encargó de llevar a una nueva dimensión, pilotando la OPV que terminó conduciendo a la salida a Bolsa de Inditex, el 23 de mayo de 2001. Una operación clave que le valió a la compañía para nutrirse de todos los fondos necesarios para impulsar ese crecimiento global que alcanzaría a protagonizar durante los siguientes años, y hasta llegar al mismo día de hoy, en el que Inditex se presenta como la principal compañía global de la industria de la moda.
Un presente al que Castellano, tras la salida a Bolsa del grupo, continuó dando forma como director ejecutivo de Inditex, y trabajando al dictado y mano a mano con Amancio Ortega, a nivel de marcas, con el lanzamiento de Zara Home, la cadena de hogar y decoración del grupo en 2003. La última que sumaría Inditex a su cartera bajo su dirección ejecutiva antes de su salida de la empresa en septiembre de 2005, fecha en la que el grupo contaba con un portafolio así pues integrado por un total de siete marcas comerciales, las mismas que lo siguen conformando a día de hoy: Zara, Massimo Dutti, Pull&Bear, Bershka, Stradivarius, Oysho y Zara Home. Una cartera esta que, ya bajo el mandato de su sucesor, Pablo Isla, trató de seguir ampliándose en 2008 con el lanzamiento de Uterqüe, descontinuada e integrada en Massimo Dutti en 2021, y con la puesta en marcha de Lefties, que a pesar de su posicionamiento cada vez más sólido en el mercado, y de su evolución de espacio de venta outlet a firma de moda familiar, sigue operando, al igual que Zara Home, bajo el paraguas de la marca Zara.
En cuanto al crecimiento económico experimentado por la compañía, al cierre del ejercicio de 1996, el previo a la entrada de Castellano como vicepresidente y consejero delegado, Inditex informó de unas ventas totales por valor de 166 639 millones de pesetas, unos 1 001,52 millones de euros a tipo de cambio fijo de conversión, y de un beneficio neto de 12 102 millones de pesetas, unos 72,73 millones de euros. Unas cifras de negocio que al cierre del ejercicio de 2005, el último en el que Castellano llegó a permanecer dentro de las filas de Inditex, se situaban disparadas, con unas ventas anuales por valor de 6 740,8 millones de euros (+573 por ciento frente a los resultados de 1996), y un beneficio neto de 810,9 millones de euros (+1 015 por ciento). Resultados que la multinacional de la moda española alcanzaba entonces a firmar, apoyada por esa cartera de siete marcas propias, más la cadena de moda infantil Kiddy’s Class, y por una red comercial de 2 692 tiendas, tras abrir, solamente en 2005, 448 nuevos puntos de venta netos.
Amancio Ortega despide a Castellano
En justa respuesta a esa magnífica labor al frente de la compañía, a todos los años de confidencias que llegaron a compartir, y al margen de cualquier distanciamiento que pudiera haberse llegado a dar en el pasado, tras el fallecimiento de Castellano, quien durante años —y especialmente durante el proceso de la salida a Bolsa— ejerció de cara visible del grupo Inditex frente a accionistas, analistas e inversores, dando respuesta al perfil íntimo, alejado y discreto que siempre ha querido mantener su fundador, este mismo, Amancio Ortega, ha roto momentáneamente su silencio y su contenido perfil, para despedir a quien fuera su primera mano derecha. Un José María Castellano al que no ha dudado a la hora de valorar como a una “figura esencial en la historia de Inditex”.
“Lamento profundamente el fallecimiento de José María Castellano, una figura esencial en la historia de Inditex y, por encima de todo, una gran persona, como sabemos todos los que tuvimos la suerte de conocerle y de contar con su colaboración”, ha expresado Amancio Ortega tras conocerse el fallecimiento del reconocido empresario y directivo gallego. Ante tan luctuoso acontecimiento, “mis más sinceras condolencias para sus seres queridos por esta triste pérdida, un sentimiento que compartimos cuantos formamos parte de esta empresa”. “Su marcha representa también una gran pérdida para el mundo empresarial de Galicia y de España, en el que José María siempre destacó por su brillantez, profesionalidad y compromiso personal”. “Todos en Inditex admiramos a Caste, y siempre ocupará un lugar muy especial en el corazón de la compañía”.
- El miércoles 17 de septiembre de 2025 falleció José María Castellano, figura clave en la historia de Inditex y mano derecha de Amancio Ortega en la creación del grupo.
- Castellano desempeñó roles importantes en Inditex, incluyendo el de vicepresidente y consejero delegado, liderando la expansión y salida a bolsa de la compañía.
- Tras su salida de Inditex, Castellano ocupó cargos de liderazgo en otras empresas como ONO y Novagalicia Banco, y participó en consejos de administración de varias compañías como Puig y Bimba y Lola.
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