La moda como reflejo de transformación cultural y económica
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CDMX - “La moda es uno de los indicadores más tempranos de la transformación de modelos económicos”, cuenta en entrevista para FashionUnited Francisco López Navarrete, Director de Programa y Profesor en MIT Management Executive Education y en la Universidad Complutense de Madrid. Hoy en día nos encontramos en una época de cambios constantes, económicos, políticos, sociales, culturales y tecnológicos, los cuales han comenzado a reflejarse con mayor fuerza en la industria a nivel global.
Con miras al próximo año el experto nos cuenta el papel que ha jugado la moda hasta el momento, sobre todo en América Latina, y nos comparte un poco sobre su visión de hacia dónde se está encaminando para los próximos 15 años. “Este año ha sido un año de cambios sociales en muchos países, además de cambios a nivel tecnología y distribución que están influenciando la industria de la moda, ya que yo creo que esta industria es un reflejo directo de la transformación del entorno”. El experto explica que aunque han habido muchos temas de impacto en el año reflejados en la moda, destaca tres que han sido clave: la tecnología aplicada a la distribución y al producto, los movimientos sociales como “me too”, y el aumento de la urbanización, el cual se ha visto reflejado en las colecciones cápsula de las grandes marcas que se acercan cada vez más a la cultura urbana.
En el caso de América Latina, Francisco detalla que el año cierra en un momento de expectación en varios de los países de la región. En particular, destaca el caso de Brasil, donde el presidente electo ha generado una sensación de tranquilidad en los empresarios, mientras que hay una gran incertidumbre sobre cómo se desarrollará su gobierno a nivel social. La gran mayoría de los países de la región también concluyen el año con fuerte incertidumbre política e inestabilidad económica, dos indicadores que limitan el crecimiento de la industria de la moda al sur del continente. No obstante, el experto reconoce que cada vez surgen más oportunidades para Latinoamérica de la mano de países que estabilizan su economía y muestran un futuro más sólido, como lo son Chile y Colombia.
En el caso de México, Francisco menciona que el hecho de que siga presentando un crecimiento lento pero constante le ha abierto muchas puertas a la industria de la moda en el país. “México es un país que tiene muchísimo talento, pero al final lo que le falta es una estructura”, indica López Navarrete como el gran reto a vencer en el país. La creatividad siempre ha sido parte de la cultura mexicana, lo que ha sido una ventaja competitiva en la oferta de moda nacional. Sin embargo, de la mano con la tesis del académico acerca de la moda como un reflejo de la situación de un país, él atribuye el crecimiento de esta industria en el territorio al aumento de la clase media con buen poder adquisitivo. “Este aumento de clase media es muy importante para el sector que tiene el mayor crecimiento en la industria: el segmento Premium, que abarca las marcas que ofrecen diseño y experiencia a un precio más asequible, como es el caso de marcas internacionales como Michael Kors o Ralph Lauren, o macas mexicanas que están surgiendo como Pink Magnolia”. El aumento de las tiendas de este segmento en el país representa un indicador del crecimiento y fortalecimiento del mercado.
En cuanto a la situación de México como productor de moda y de lujo, el profesor del MIT también ha encontrado indicadores bastante favorables. “Las marcas mexicanas se están internacionalizando y eso es fantástico. Esto indica que el producto mexicano es bueno y que tiene la capacidad de llegar a otros países. Y la razón por la cual lo están haciendo es por el éxito y los ingresos que han generado primero durante sus años en el país. Gracias a estos resultados es que han obtenido inversores que les permiten cruzar las fronteras”.
De cara al futuro
Francisco cuenta a FashionUnited que él ya tiene los ojos puestos en el 2030, ya que actualmente nos encontramos viviendo la revolución más grande desde la Revolución Industrial, lo que permite vislumbrar lo que está por venir, y de acuerdo a sus análisis a la industria de la moda le esperan grandes cambios. En particular, destaca que el principal indicador que habla del futuro de la industria es la creciente concentración de personas en las ciudades. “Las necesidades no se crean, ya están creadas, lo que cambia es el entorno y desde hace dos años la población urbana ha superado a la rural. Si miramos al 2030 estaremos triplicando las ciudades con más de 20 millones de habitantes, es decir, habrán espacios muy pequeños con alta densidad”, explica. El entorno que plantea el analista trae consigo muchos cambios, entre ellos un creciente precio del metro cuadrado, por lo que el retail va a modificarse necesariamente, ya que no será redituable para una empresa tener una gran tienda si quiere conservar sus precios. “Como consecuencia, también va a cambiar la distribución porque no se va a poder tener tanto producto en almacén. Al final, quienes van a liderar esto serán quienes se muevan mas rápido en adaptar la experiencia en el punto de venta y en el uso de nuevas tecnologías”.
El analista y académico cuenta que las dos variables más importantes que se tendrán que considerar desde ahora y de cara al futuro son el tiempo y el espacio. Por su parte, el tiempo en el que se replica un producto y se presenta en el punto de venta ha disminuido exponencialmente. El concepto de espacio también se ha transformado, ya que hoy en día es posible comprar en otro país sin tener que viajar. El reto a vencer es tener estas dos variables en mente al planear hacia adelante, por lo que destaca nuevas estrategias de venta, como prendas solo para probar en tienda para generar compras en línea en el mismo local y mantener los almacenes fuera de las ciudades. Asimismo, acentúa que en esta época de adopción de la tecnología en la industria muchas marcas han errado en su estrategia y solo han incorporado estos elementos sin un propósito claro. En cambio, especifica que la tecnología al final debe estar al servicio del consumidor y de la experiencia, ya que solo así será de uso para las marcas.
Ante una inminente transformación, López Navarrete indica que la ventaja competitiva no se encuentra en el producto sino en la experiencia y en el diseño como base de la misma. “Es por ello que la industria de la moda y del lujo son los mayores indicadores de la transformación de los modelos de negocio”, expresa el directivo del programa de International Management Fashion Program del MIT. “Las mejores industrias para transformar los negocios son justo la de la moda y la del lujo porque se trata de una manifestación cultural, un reflejo de cómo se vive. Es por ello que son las industrias mas rápidas en responder a los cambios sociales. Con ello en mente, hay que tomar en cuenta que hoy en día es necesario tener otra visión de las cosas y utilizar la tecnología como facilitador, y la experiencia y diseño como centro de la estrategia de una marca”.
Foto: Francisco López Navarrete