Detenida una modelo en Yemen, donde los rebeldes hutíes imponen un severo código moral
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Dubái- Intisar al Hamadi soñaba con desfilar en las pasarelas, pero esta modelo yemení de 19 años se encuentra entre rejas desde hace dos meses en Saná, controlada por los rebeldes ultraconservadores hutíes, en una muestra de la difícil situación de las mujeres en este país en guerra.
Fue detenida el 20 de febrero, junto con dos camaradas y un amigo, que las había llevado a una sesión fotográfica, "sin orden de la fiscalía" ni "ninguna acusación en su contra", según Khaled al Kamal, su abogado.
"Hasta hoy, como abogado, no sé qué es lo que se le reprocha" oficialmente, declara a la AFP, mencionando "intentos de difamarla" a través de rumores de prostitución y consumo de drogas.
Con su rostro de adolescente y mirada profunda, Intisar al Hamadi, nacida de una madre etíope, cuenta con miles de seguidores en Facebook e Instagram, donde publicó fotos posando para creadores locales.
Con vestidos yemeníes o chaquetas de cuero, aparece a veces sin velo, lo que es mal visto en esta sociedad muy conservadora, en particular por los hutíes.
Hasta la fecha, los insurgentes no reaccionaron públicamente sobre el tema.
Con el apoyo de Irán, el movimiento islamista se apoderó de la mayoría del norte de Yemen en una guerra devastadora, librada desde 2014, contra el gobierno reconocido por la comunidad internacional.
"Las autoridades de facto en el poder odia el arte, odian a los artistas", afirma Al Kamal.
Tras la apertura de una investigación el 21 de abril, la joven modelo fue interrogada sobre temas como la "prostitución" y el "libertinaje", según el abogado.
"El fiscal está tratando de hacer que el caso parezca un ultraje al pudor, alegando que mi clienta había dejado dos mechones de pelo sobresalidos o bien no llevaba velo en un espacio público", explica.
"Tratan de acusarla de cualquier crimen debido a su trabajo, al que los hutíes se oponen. '¿Cómo te atreves a ser modelo en un país musulmán?'", insiste el abogado.
"Su madre no deja de llorar. Su hermano pequeño es discapacitado. Ella era el único sostén de la familia. Es una situación dolorosa", añade.
Código moral
Si bien la sociedad yemení sigue siendo muy conservadora, mantiene un margen de libertad en los ámbitos del arte y la música. Pero los rebeldes hutíes impusieron un estricto código moral dirigido específicamente a las mujeres.
Ante la lentitud de la justicia, el abogado movilizó a los medios de comunicación y a la sociedad civil. En las redes sociales, la palabra clave "Liberen a Intissar" --en árabe e inglés-- aparece frecuentemente en las últimas semanas.
"Según la visión de los hutíes, lo que está en juego es moral porque es un grupo religioso extremista", explica a la AFP Tawfik al Hamidi, presidente de la organización SAM para los derechos y libertades en Yemen.
"La actividad de Intisar y el campo en el que trabaja, la moda, son nuevos en Yemen. Es algo que el movimiento no puede aceptar", precisa este militante yemení de los derechos humanos, instalado en Austria.
Para él, "la situación de las mujeres en general en Yemen es catastrófica (...) y todas las partes contribuyen de una manera u otra", añadiendo que es peor en las zonas controladas por los hutíes, que se inspiran en el modelo represivo iraní.
Las detenciones, la tortura, las desapariciones forzadas y la violencia sexual son especialmente frecuentes en Saná. Los hutíes también "limitan a las mujeres en términos de derechos económicos, libertad de movimiento y acceso a los empleos públicos", lamenta Tawfik al Hamidi.
La violencia y la discriminación que sufren las mujeres yemeníes se han visto exacerbadas por el conflicto, que ha causado cientos de miles de muertos, millones de desplazados y ha llevado a la población al borde del hambruna.(AFP)