Durante Fashion Week México, se rinde homenaje a un ícono de la moda
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Una semana llena de moda en un escenario natural distintivo de México acaba de concluir, cerrando así la primera edición de Fashion Week de este año. En esta ocasión, la celebración de moda nacional se realizó de una forma distinta, invitando también a diseñadores de Arabia Saudita para crear una semana conjunta.
Entre los diseñadores mexicanos que se presentaron, resaltaron aquellos que han dejado marca dentro y fuera del país como firmas que elevan el lujo nacional. Uno de ellos fue Alfredo Martínez, quien busca reflejar el estilo de la figura femenina del siglo XXI en sus diseños.
Además de presentarse regularmente en la semana de la moda mexicana, el diseñador también ha desfilado sus creaciones en España, Colombia, Costa Rica, República Dominicana y Guatemala. Sus prendas han sido portadas por celebridades internacionales como Lupita Nyong'o, Rosalía, Lana del Rey, Cindy Crawford, Belinda y Thalía, por mencionar algunas.
En 2017 Alfredo Martínez fue reconocido como el Mejor Diseñador de Modas de parte de The Fashion Group International. En su carrera no sólo ha destacado por sus lujosos diseños, sino que también ha ampliado su marca con colecciones retail, como la que realizó para LOB, y por su visión artística más allá de la moda, como la serie de fotografías que tomó él mismo para presentar su colección otoño invierno 20/21.
Con el sello de socialité
Para la colección que presentó en la última edición de la semana de la moda, Alfredo Martínez tomó como inspiración a la filántropa y coleccionista de moda y arte Nan Kempner. La neoyorkina se caracterizó por tener un estilo envidiable, pero también por su visión al seleccionar las piezas más importantes del siglo XX.
A través de los 30 looks presentados, el diseñador busca representar el carácter y el estilo de Nan Kempner. Además busca inspirar a que otras mujeres tomen su ejemplo y se sientan inspiradas por ella, quien además tenía una personalidad fuerte que alzaba la voz.
La colección tiene cuatro colores, los cuales predominaban en los looks icónicos de la socialité. El verde botella, el dorado, el negro y el amarillo mostaza (aunque en algunos looks es más brillante). Estos tonos se presentan tanto en looks totales, como en vestidos largos o trajes sastres, o bien combinados entre sí, como un traje amarillo encaje negro.
En general, se trata de una colección elegante, con prendas que bien pueden ser para una fiesta por la noche, con acabados metálicos, o para una junta formal. Esto se logra también con las texturas que Martínez eligió, como la seda, el encaje y la piel.