Palomo Spain, "liberador" del hombre, abre la moda masculina en París
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Volúmenes, escotes, flores, flecos... La firma Palomo Spain se inspiró en lo más femenino con el propósito de "liberar" al hombre. Una fructuosa apuesta que este martes le llevará a abrir la Semana de la Moda masculina en París, un hito para una marca española.
"Hay creatividad, diversidad, un poco de perturbación. Lo esperamos con impaciencia", dijo la prestigiosa Federación de la Alta Costura y de la Moda, al explicar a la AFP qué razones le llevaron a seleccionar a la joven firma para abrir la cita, en la que desfilan grandes casas como Dior, Louis Vuitton y Hermès. El ascenso del diseñador Alejandro Gómez Palomo, de 25 años, ha sido fulgurante.
De Pedro Almodóvar a Beyoncé, -las mujeres también quieren vestirse con su ropa para hombre-, las estrellas aplauden su estilo calificado de "transgénero", "neutro" y "gay", aunque el joven cordobés formado en Londres rechaza las etiquetas. Es ropa -reivindica- para cualquiera que quiera ponérsela.
El vestido de Beyoncé
El universo de Palomo Spain, marca lanzada hace apenas tres años y ya exhibida en las pasarelas de Nueva York y Madrid, es inconfundible: hombres sensuales y provocadores, que marcan silueta, lucen tejidos coloridos, volantes, transparencias... Las opciones para "los chicos a quienes les apetece disfrutar de la moda" se amplían gracias a prendas que se "atribuían al armario femenino", explica Palomo a la AFP.
"Es muy liberador", asevera por teléfono el diseñador, cuyo despampanante vestido floreado lucido por Beyoncé al presentar a sus gemelos recién nacidos el año pasado engrandeció en gran medida su fama. También Miley Cyrus y Rossy de Palma llevaron sus creaciones, que Palomo adapta caso por caso a la mujer, puesto que siempre utiliza un patrón masculino, sin pecho.
Lo contrario de Saint Laurent
Si Chanel liberó a la mujer y Saint Laurent la vistió con prendas tradicionalmente masculinas como el esmoquin y la gabardina, lo que en su día supuso "una revolución absoluta", Palomo afirma estar haciendo "el ejercicio opuesto".
"No soy el primero", explica, recordando el camino abierto en los años 1980 por Jean Paul Gaultier, que vistió al hombre con faldas y corsés. "Pero yo lo estoy haciendo con una naturalidad tremenda", afirma quien ya a los cinco años dibujaba modelos para vestir a sus Barbies. Su revolución la maquina desde su pequeño pueblo natal de Posadas, en el sur de España.
Aunque viaja a menudo y "se empapa" del estilo que observa en capitales como París y Londres, valora la "tranquilidad que te da un pueblo y la posibilidad de estar totalmente concentrado en el trabajo". No sale mucho, explica.
La moda 'un poco rancia' de España
Cruzar el Atlántico tampoco le parece muy seductor. "Me han vuelto a invitar" a los desfiles de Nueva York, pero "no es nada fácil". "Imagínate llegar con 20 maletas al aeropuerto", en una ciudad tan "grande, tan cara y tan lejos".
A la capital francesa, su padre y sus colaboradores viajaron en furgoneta desde Posadas con la ropa colgada en perchas. "Ahí puedes meterlo todo, hasta una pata de jamón si te apetece", dice entre risas. Su desfile del martes lo afronta con "serenidad". "Yo me pongo muy pocas veces nervioso, pero tengo muchísimas ganas de ver cuál es la reacción" del público.
Aparte de Palomo Spain, solo una marca española Loewe, que pertenece al gigante del lujo LVMH y opta por una presentación de su colección en vez de un desfile, está presente en la Semana de la Moda parisina. La moda en España está "estancada en algo un poco rancio. Nadie se atrevía a salir y a tener una voz fuera, pero yo tenía un mensaje que iba más allá", asegura. (AFP)
Fotos: Oscar Gonzalez / NurPhoto / AFP