Según los expertos, las condiciones de trabajo flexibles deberían ser la nueva normalidad

Las colecciones de Primavera/Verano 2021 presentadas durante las semanas de la moda online de este mes, fueron en gran parte creadas por equipos que trabajaron desde casa. Como las oficinas, estudios y fábricas estaban cerradas desde marzo, se necesitaban nuevos métodos de trabajo para hacer frente a la alteración de los negocios en todos los sectores de la industria de la moda.

Las políticas gubernamentales para contener la propagación del Covid-19 han sido muy criticadas, pero una cosa que ha salido de la pandemia es el flujo de cómo hacemos negocios: cómo trabajamos, dónde, cuándo, por cuánto tiempo y en qué condiciones.

Un informe de IPPR, un grupo de expertos en políticas progresistas, sugiere que la experiencia de la pandemia puede aportar lecciones sobre cómo se podría organizar el trabajo de manera más eficaz en el futuro, con una mayor agencia en el lugar de trabajo y con más tiempo para las cosas importantes de nuestras vidas fuera del trabajo remunerado.

Muchos se han adaptado a trabajar desde casa, mientras que los trabajadores de industrias como la manufactura están interesados en un horario de trabajo más flexible, aunque signifique que se les pague menos, según el informe.

La forma en que trabajamos ha cambiado

La pandemia ha precipitado un cambio en la forma y el momento en que se realiza el trabajo. En respuesta a las medidas de distanciamiento social, las fábricas que continuaron operando han introducido cambios en los patrones de turnos. Mientras que gran parte de la fabricación se detuvo o redujo en las primeras etapas, en los trabajos de escritorio o no manuales trabajar desde casa se ha convertido en algo habitual.

Con un 85 por ciento de los empleados de la industria de la moda trabajando desde casa en abril, ha habido un cambio radical en la forma de realizar los trabajos. Según Edited, el teletrabajo puede parecer una solución temporal para ayudar a contener el coronavirus en este momento, pero no significa que los retailers no deban considerarla una política a largo plazo post-pandemia.

Aunque muchos países han reducido las restricciones, las empresas siguen dudando a la hora de levantar las medidas de distanciamiento social y de acoger a los trabajadores en sus oficinas. Mientras que la industria tecnológica ha basado todo su marco en políticas de trabajo flexibles y estaba bien equipada para manejar estas prácticas de auto-aislamiento obligatorias, la industria del comercio minorista y de la moda ha tenido menos estructura para prepararse para ello.

Los trabajos basados en lugares específicos requieren flexibilidad

Muchos de los creativos ya estarán acostumbrados a formas flexibles de trabajo, pero los roles tradicionales de diseño y producción y los que requieren máquinas para crear prendas de vestir, habrán sido un reto. Según Stylus, las plataformas de diseño digital 3D permiten a los creativos ejecutar estos trabajos a distancia y la capacitación tecnológica será un requisito para las fuerzas de trabajo innovadoras posteriores al Covid-19. Para la mayoría de las empresas, las reuniones se realizan a través de Skype y Zoom, mientras que los trabajos en lugares específicos, como las sesiones fotográficas de moda o la línea de producción en las fábricas, requieren acuerdos de trabajo flexibles y creativos.

Rachel Statham, investigadora principal del IPPR, dijo al Daily Mail de Reino Unido: La forma en que la gente trabaja ya estaba cambiando antes de Covid-19, pero los últimos meses han demostrado lo lejos y lo rápido que es posible innovar: menos horas, turnos más flexibles, más flexibilidad en general.

No es sólo la gente con trabajos profesionales y de oficina que trabajan desde casa. Las fábricas y las empresas de ingeniería en todo el Reino Unido también han estado operando de manera diferente, en formas que se adaptan a su personal y han sido diseñadas conjuntamente con ellos.

Incluso mientras seguimos sosteniendo la economía para recuperarnos de la crisis de la pandemia, necesitamos captar esas mejoras y aprender a ser más receptivos a las necesidades cambiantes de la fuerza laboral del Reino Unido, incluso en las industrias manufactureras, a largo plazo”.

Este artículo ha sido previamente publicado por FashionUnited.uk y traducido y editado por Belén Bednarski

Foto: FashionUnited; fuente del artículo: IPPR