Conoce a los ganadores del concurso #MOMADTalentsbyISEM

#MOMADTalents by ISEM es un concurso dirigido a nuevas marcas y diseñadores, con un máximo de tres temporadas en el mercado, que cuentan con ideas innovadoras.

La firma española Magno Montero ha resultado ganadora en esta edición, seguida de la marca colombiana Disorder Urban, por lo que podrán presentar su colección en la próxima edición de MOMAD que se estará celebrando del 3 al 5 de febrero de 2023 en recinto ferial de Ifema. Además, el primer ganador tendrá la posibilidad de cursar Fashion and Creativity Management by ISEM.

Desde FashionUnited hemos querido conocer en profundidad, que hace merecedoras de este reconocimiento a ambas marcas.

Magno Montero

Hace dos años emprendieron la aventura de registrar la marca en España y la UE, así como a investigar un poco el modelo de negocio y como querían desarrollar su trabajo, nos cuenta Jesús Montero, fundador de la firma.

El lanzamiento vino después, en diciembre de 2021 con una colección cápsula de 9 prendas con la que analizaron el mercado. Tras una experiencia satisfactoria decidieron seguir adelante con el proyecto.

En Magno Montero crean moda con una estética muy arquitectónica, por influencia de la formación en la materia su creativo, lo que se traduce en sus prendas en forma de volúmenes, texturas, geometría y movimiento, de acuerdo a cada tipo de tejido y sus cualidades.

Este consideran que es su punto clave de diferenciación, pero también su exclusividad en lo que a cantidades se refiere: “no estamos interesados en producir en masa, pues no va acorde con nuestros valores de marca” hablamos de unas 10 o 15 prendas por producto. Tampoco siguen el calendario tradicional de la moda al presentar sus colecciones.

Además se definen como una marca responsable y consciente, “que no sostenible”, recalca Montero durante la conversación. Y es que su fundador defiende que “lo único sostenible es aquello que no se ha creado”. Ellos hacen lo que consideran “esfuerzos en sostenibilidad" a través de los materiales y procesos que escogen, optando por la producción en cercanía, por ejemplo para reducir su huella de carbono.

Piezas monomateriales para facilitar su reciclado

Sus piezas son monomateriales, hechas a base de algodón orgánico o Lyocel certificado, para que cuando a la prenda le llegue el final de su vida útil, se pueda reciclar fácilmente, algo que dificulta la mezcla de tejidos.

Confían en las certificaciones a la hora de escoger a sus proveedores, pues es la única garantía que tienen a su alcance, aunque también cuenta que un punto más positivo de trabajar en cercanía, les permiten controlar de cerca los procesos y conocer las condiciones en las que trabajan los eslabones más cercanos de su cadena de valor.

Trabajan con dos canales, aunque avanzan hacia la omnicanalidad como meta. En Barcelona forman parte de una tienda multimarca física, también están presentes en un concept store en Francia —en Perpignan— a nivel de retail, “nos compran una cierta cantidad de prendas y ellos se encargan de comercializarla” explica el fundador. Además tienen una tienda online, en la que usualmente reciben a aquellos clientes que les encuentran a través de redes sociales. Así como en el marketplace finlandés especializado en la moda sostenible Ívalo.

Avanzando hacia el mercado mallorista

Su propósito para este año es ganar terreno en el canal wholesale, lo que les animó a participar en Momad, pues lo consideran un segmento en pleno resurgimiento y que se adapta muy bien a las necesidades de su producto, pues “la gente tiene que verlo, tocarlo, probarlo”, de ahí la importancia de este escenario, porque les va a permitir explorar otro canal, que su producto esté ubicado en tienda física y que la marca empiece a crecer y ser conocida especialmente en Europa, su principal mercado.

Actualmente tienen presencia de manera internacional a través de su web, pero la mayoría de sus ventas se concentran en Francia, Alemania, EEUU y en Finlandia.

Disorder Urban

Disorder Urban lleva funcionando desde hace aproximadamente un año. Sus fundadoras Yei y Bibi empezaron este proyecto con el interés de crear un producto atractivo, llamativo y reciclable, pero también accesible económicamente. Se interesaron por participar en Momad tras conocer el proyecto Momad Talent al considerarlo una oportunidad para que conocieran su producto fuera de Colombia.

Escogieron como material el PVC, que destaca por la vistosidad de los múltiples colores que toma al transformarse en calzado, pues no querían hacer un “producto convencional”, explican.

“Compra, usa y recicla" es su lema. Y es que el PVC que adquieren, por motivos de calidad debe ser nuevo, después de ser usado, sí que lo pueden reciclar y esa es la parte del proceso en la que se están concentrando actualmente.

Cuando el producto que cualquier cliente adquiere en Disorder Urban llega al final de su vida útil, puede ser devuelto a la empresa, que se encargará de triturarlos y gestionar que tengan una segunda vida útil, especialmente en el sector agrícola.

Los precios, traducidos a euros desde pesos colombianos variarían entre los cerca de 16 euros de las chanclas más económicas a los 26 euros de unas botas o los 24 de unas deportivas, también venden bolsos por valor de unos 40 euros.