Adiós a Jane Birkin: pulsión, inspiración y motivo del “Birkin” de Hermès

Madrid – El mundo de la cultura y de las artes llora a Jane Birkin, célebre cantante y actriz anglo-fancesa que tristemente fallecía este domingo, 16 de julio de 2023, en su domicilio de París a los 76 años de edad, dejando tras de sí una tan reconocida como aplaudida estela en tantas disciplinas como alcanzase a tocar a lo largo de su igualmente consolidada como precoz carrera profesional. Una trayectoria no ajena a la polémica, que no solamente la condujo a encumbrarse como uno de los grandes mitos del cine y de la música de la Europa de la década de los 70, sino a inspirar una de las más grandes y demandadas y exclusivas piezas de cuantas coexisten dentro del abigarrado mundo de la moda: el codiciado bolso modelo “Birkin” de Hermès.

Ligada por y para siempre al mundo de la moda a causa de dicho motivo, Birkin, hija de David Birkin, un reconocido teniente comandante de la Marina Real Británica y espía durante la Segunda Guerra Mundial, y de Judy Campbell, una igualmente actriz británica de cine y teatro que alcanzó a destacarse como musa del dramaturgo Noël Coward, nacía en el West End londinense, en el barrio de Chelsea, un 14 de diciembre de 1946. Sin haber todavía cumplido los 20 años de edad, Birkin empezó a dar muestras de su carácter independiente y contestatario, oculto bajo un velo de sensual timidez, contrayendo matrimonio con el compositor británico John Barry, trece años mayor que ella. Fruto del matrimonio, nacería su primera hija, Kate Barry (1967), reconocida fotógrafa británica quien tristemente fallecía en diciembre de 2013, antes de que la pareja se divorciase en 1968. Tras haber participado, en un papel no acreditado, en la película británica “The Knack ...and How to Get It” (1965), Birkin siguió tratando de alimentar su “instinto” de actriz yendo tras los pasos de su madre, consiguiendo un pequeño papel en la película “Blowup” (1966) de Michelangelo Antonioni. Cinta de culto en la que, bajo la dirección del reconocido cineasta italiano, compartiría cartel junto a figuras de la talla de David Hemmings y Vanessa Redgrave, y junto a rostros por entonces tan destacados de la escena de la moda como los de la modelo Peggy Moffitt o el de la mítica Veruschka. Siendo la interpretación de Birkin una de las que más expectación terminarían levantando, a razón de un más que sonado desnudo que terminó por despertar no pocas críticas durante la época, convirtiéndose la escena en una de las que mayor impresión llegó a provocar entre los espectadores de esta cinta inspirada en una obra de Cortazar.

Tras su sonado papel a las ordenes de Antonioni, Birkin aparecería en cintas como Kaleidoscope (1966), en Wonderwall (1968) y en Slogan (1969), película francesa que llegaría para marcar un antes y un después, ya no solamente en la vida profesional sino también personal de la actriz, una vez que terminó por conocer a quien alcanzaría a ser su “partenaire” en la grabación, al actor y cantautor francés Serge Gainbourg. En el inicio de una relación que siempre ha sido tildada de “flechazo” a primera vista, Birkin no solamente entraría a coportagonizar la película junto a Gainbourg, sino a interpretar juntos la canción “La Chanson de Slogan”, compuesta por este como tema principal de la cinta. Colaboraciones que llegarían solamente como las primeras de la amplia serie de proyectos compartidos que emprendería la pareja, al tiempo que consolidaban su posición como la imagen estereotipada de la típica sensual, creativa, culta (y algo arrogante) pareja de amantes parisina. Siendo estos unos años en los que Birkin alcanzaría a firmar algunas de sus más importantes contribuciones al mundo del cine, con su aparición en la igualmente película de culto “La Piscine” (1969) junto a Romy Schneider y Alain Delon, o “hace historia” en el mundo de la música lanzando a dúo con Gainbourg el tema “Je t’aime… moi non plu”. Una canción originalmente escrita para Brigitte Bardot, con la que el cantante acaba de finalizar una agitada relación sentimental, y que Birkin terminaría entonando con un contenido de marcado carácter sexual, que llevó a que la canción terminase siendo censurada en emisoras de Italia, España o Reino Unido.

Asentada ya en Francia desde el inicio de su relación con Gainbourg, Birkin consolidaba su posición en el país galo tanto dentro como fuera de la pantalla, destacándose como una de las primeras musas de Paco Rabanne y potenciando sus colaboraciones con Gainbourg. Para quien decidió por ejercer enteramente como musa desde 1971 a 1972, para regresar al mundo del cine protagonizando una nueva polémica, muy a la francesa, como la amante de Brigitte Bardot en la cinta de corte erótico “Don Juan ou Si Don Juan était une femme…” (1973), a la que siguieron actuaciones igualmente comentadas como la de su aparición en “Je t’aime moi non plus” (1976), la primera película dirigida por Serge Gainsbourg, y que terminó por dividir a una escena cultural francesa entre aquellos que defendía y quienes tildaban de “inmoral” esta obra que tomaba por nombre la de la ya polémica canción interpretada por la pareja Birkin-Gainbourg. Pareja fruto de la cual nacería la hoy también actriz Charlotte Gainsbourg (1971), y que, entre rumores de agresividad y de posibles malos tratos y de problemas de alcoholismo por parte de Gainbourg, terminaría por separarse en 1980. Años durante los que Birkin continuaría volcada en su faceta como actriz apareciendo en cintas como las adaptaciones al cine de las obras de Agatha Christie “Muerte en el Nilo” (1978) y “Maldad bajo el sol” (1982), mientras sentimentalmente reconstruía su vida junto al cineasta Jacques Doillon. Director y guionista francés bajo el que alcanzaría a protagonizar dos películas, y junto al que terminaría teniendo a su hija Lou Doillon (1982), cantante, modelo y actriz a día de hoy ligada a casas como Cartier, antes de que la pareja se separase en 1991. Siendo desde entonces, y hasta su triste fallecimiento este 16 de julio de 2023, unos años durante los que Birkin siguió muy presente tanto en las escenas del cine como de la canción francesa, mediante proyectos como el del lanzamiento del álbum y de la gira de conciertos “Arabesque” realizados junto a Gainbourg, el de “Enfants d’Hiver”, el primer disco de canciones propias de Birkin, en 2008, o con su aparición en el documental “Jane par Charlotte”, dirigido por su propia hija Charlotte Gainsbourg en 2021.

El “Birkin” de Hermès: un bolso para madres primerizas

En cuanto a su legado por y para dentro del mundo de la moda, además de musa de, entre otros, el español Paco Rabbane durante aquel París de los años 70, sin duda alguna el nombre de Jane Birkin va a quedar para siempre ligado al del ya mítico modelo Birkin de Hermès. Un diseño del que la misma actriz británico-francesa alcanzó a ser pulsión, inspiración y el motivo para el que finalmente alcanzase a confeccionarse el que sigue siendo, a día de hoy, el summum de la elegancia en el vestir, así como el sueño más aspiracional tanto de consumidores como de marcas de los extremos más opuestos de los 5 continentes. Y es que si son especialmente codiciados los distintos diseños del Birkin de Hermès por parte del amplio público, lo es igualmente entre las casas de moda el alcanzar a valerse de un diseño con una identidad propia tan potente como la que cuenta el mítico modelo de la casa francesa. Un logro que únicamente podemos contar que hayan alcanzado a realizar, además de Hermès con su Birkin, la igualmente francesa Dior con su diseño “Lady Dior”, creado en exclusiva como obsequio para la princesa Diana de Gales con motivo una visita a París en 1995; el modelo “2.55” diseñado por la mismísima Gabrielle Chanel; o el siempre atemporal modelo “Amazonas” de Loewe.

Según a este respecto narran desde la misma casa de modas francesa, el “Birkin” se creó en mitad de un ambiente tan insólito como el de un vuelo de París a Londres, que en 1984 alcanzaron a compartir Jane Birkin y Jean-Louis Dumas, presidente de Hermès entre 1978 a 2006, además de director creativo de la firma de moda francesa. Casa que precisamente Dumas, heredero directo de la familia Hermès fundadora de la Maison, se encargó de revitalizar y de impulsar hasta la categoría de marca global del lujo que ostenta a día de hoy, mediante ejercicios tan brillantes de creatividad como lo fue el alumbrar la creación del “Birkin”. Un diseño que terminó por esbozar en mitad de pleno vuelo, con el único propósito de, además de aprovechar esas horas muertas de trayecto, dar respuesta a las demandas de la actriz. Quien, como madre, se lamentaba frente al director creativo de la Maison francesa de no poder encontrar ningún bolso que pudiera responder a sus necesidades. Una demanda frente a la que no dudó en responder su acompañante de vieaje, esbozando un diseño rectangular, flexible y amplio, que contaba como principales particularidades su capacidad para abrirse por completo para mostrar todo el interior del bolso, o hasta inclusive de contar con un compartimento para biberones: había nacido el Birkin de Hermès.

Actualmente confeccionado por la casa francesa en una infinitud de acabados y motivos que, producidos siempre en unas muy cuidadas ediciones limitadas, y siempre a mano, lo llevan a mantenerse como una de las piezas más codiciadas —y también más rentables— de cuantas se producen al abrigo de la industria de la moda, tanto entre amantes de la moda como de coleccionistas, el Birkin sigue siendo desde su creación uno de los mayores símbolos de estatus ligados a una pieza de indumentaria. Un valor del que la misma Jane Birkin trató de desligarse por motivos éticos, llegando a solicitar en 2015 que la casa francesa rebautizara su diseño “Birkin Croco” debido a las preocupaciones animalistas que le despertaban las recientes informaciones destapadas por Peta sobre la materia prima que se empleaba para la producción de los modelos más exclusivos del bolso, realizados en piel “exótica” de cocodrilo. Unas pretensiones de las que finalmente la actriz y cantante desistió, después de que Hermès respondiese anunciando que había da garantías a la actriz y cantante del cumplimiento de unos nuevos y mayores estándares para el bienestar animal dentro de su cadena de valor. Un ligeramente polémico episodio en la relación entre la maison y la cantante, que nunca alcanzó a enturbiar el aprecio y cariño que desde Hermès siempre han alcanzado a profesar por Birkin, en lo que nuevamente se ha terminado viendo demostrado con el mensaje de condolencias emitido por la dirección de la casa francesa con motivo del fallecimiento de la actriz.

“Nos entristece profundamente haber conocido el fallecimiento de Jane Birkin”, proclamaban desde la dirección de Hermés este mismo domingo 16 de julio de 2023, pocas horas después de haberse conocido y confirmado el fallecimiento de la actriz y cantante y británico-fancesa. “Nuestros pensamientos están son sus hijas, nietos y seres queridos”, añaden desde la firma de moda. “Hemos perdido a una amiga cercana y a una compañera de muchos años”. “Desde una sensibilidad compartida, habíamos llegado a aprender a conocernos”, y a “descubrir y a apreciar cuánto la ligera elegancia de Jane Birkin revelaba a una artista por derecho propio, comprometida, abierta y poseedora de una curiosidad natural, tanto por el mundo como por los demás”. “Rendimos tributo al talento de Jane Birkin”, apostillan desde Hermès, y “sobre todo, a su gran humanidad mientras nos unimos a su familia en el duelo”.