Cómo trabaja en México el único consorcio de exportación dedicado a la moda

Desde 2010 Creamoda Export se ha consolidado en México como un organismo de comercio exterior especializado en moda. El consorcio apoya y da asesoramiento a las pequeñas empresas del estado de Jalisco para que puedan vender sus productos fuera del país.

Tomando como base el modelo de consorcio de exportación italiano, la organización se adaptó a la realidad mexicana obteniendo muy buenos resultados en mercados como Chile, Guatemala, Honduras, Ecuador y Estados Unidos, entre otros.

FashionUnited conversó con Amandine Weber, Gerente Coordinador, sobre cómo se ha venido desarrollando el proyecto.

¿De qué manera trabaja Creamoda Export?

"Cada año hacemos convocatorias para incorporar nuevas empresas. Trabajamos con el sector textil, marroquinería, calzado y joyería. Ofrecemos servicios en tres ámbitos. El primero tiene que ver con apoyar su competitividad empresarial, desarrollamos proyectos que aportan a la productividad, a la calidad y a la gestión. Buscamos que se conforme como un negocio competitivo capaz de estar en los mercados internacionales. La segunda rama tiene que ver con todo lo relacionado a la promoción de la empresa, desde la imagen hasta la exposición en los mercados. Esto se da a través de la organización de misiones comerciales, ruedas de negocios con potenciales clientes, visitas técnicas y participaciones en ferias o exposiciones del sector. En tercer lugar está el proceso de internacionalización con capacitaciones en temas de comercio exterior, damos apoyo en la elaboración de planes de exportación y concertación de citas con actores estratégicos para facilitar los procesos. Hacemos todo lo que sea necesario para que cuando una empresa se lance a un país esté lo más informada y preparada posible para comerciar con el cliente."

¿Cuáles son los requisitos para que una empresa pueda integrarse al consorcio?

"La empresa debe estar localizada en Jalisco, necesitamos que las compañías estén cerca para agilizar la coordinación. Además, la idea es que el consorcio sea homogéneo a nivel de las necesidades que tengan sus integrantes. Es muy difícil poder incorporar una empresa muy grande y una muy chiquita porque los requerimientos difieren mucho. Otra de las cuestiones que tenemos en cuenta es que no podemos aceptar compañías que estén al límite de su capacidad financiera porque para formar parte del proyecto les estamos pidiendo una inversión extra."

"Buscamos empresas que ya estén posicionadas en México, no tanto como marca de moda sino más bien como fábrica para otras firmas, que ya tienen su red de distribución establecida en el país."

¿Cómo se sustentan?

"Todas las empresas del consorcio integran una sociedad civil y mensualmente hacen un aporte económico. Una parte es para remunerar a los funcionarios del organismo y todo lo que tiene que ver con la cotidianeidad del consorcio y la otra parte es para el producto."

"Además, hay un aporte que hacen los Gobiernos tanto a nivel del estado como a nivel del país. Cada año nos presentamos en licitación para obtener fondos públicos para nuestros proyectos y la verdad es que nos ayuda bastante la subvención pública. No es algo automático así que siempre estamos considerando la posibilidad de que si no llega, de todas maneras hay que hacer los proyectos. La idea es que las empresas no se acostumbren a que los fondos siempre les vengan del gobierno. El año pasado pasamos por un período de transición de gubernamental en México y la subvención nunca llegó.'

¿Qué cree que llama más la atención de los países a dónde exportan productos?

"En función de las investigaciones de mercado que hemos podido realizar ofrecemos en cada país los productos que nos parecen que pueden funcionar y hacemos una búsqueda de posibles clientes."

"En Estados Unidos destacan la manufactura. En América Latina el diseño y la manufactura a través de marcas propias son muy requeridos.'

¿Cuáles son los próximos proyectos?

"A largo plazo, porque se trata de una inversión importante, nos gustaría tener una oficina de representación en Estados Unidos. A veces, algunos clientes desconfían por no tener ningún lugar de referencia allí. En este momento las ventas en ese mercado las hacemos a través de intermediarios que se llevan un porcentaje, así que la idea a futuro es tener allá una oficina de representación para poder manejar la comercialización."

"En Latinoamérica el proceso es distinto, la venta es directa. Hay mayor confianza."