Good American X Zara: Inditex sale a la conquista del mercado estadounidense

Poniendo la guinda al conjunto de iniciativas dirigidas a diversificar y elevar su oferta que han puesto en práctica desde Inditex a lo largo de estos últimos días, a través tanto de Zara como de Massimo Dutti, acaba de salir a la luz y de ponerse a la venta la colección cápsula diseñada por Zara en colaboración con Good American. Firma de moda cofundada por la popular modelo, presentadora e influencer estadounidense Khloé Kardashian, una de las hermanas menores de la socialite, igualmente mundialmente conocida, Kim Kardashian.

Respondiendo a su estrategia encaminada a facilitar a los miembros de sus comunidades de clientes unas ofertas más ajustadas a la individualidad de sus gustos, siempre en base a lo valores y al ADN de la cadena, al tiempo que avanzan en la estrategia de Inditex de consolidar la presencia del Grupo en los Estados Unidos, la cápsula Good American X Zara pasará a estar únicamente disponible y alcance de los consumidores estadounidenses. Un público que podrá adquirir las diferentes piezas de la colección, producidas en edición limitada, a través tanto de la plataforma online como de la aplicación móvil oficial de Zara para los Estados Unidos, como de un número seleccionado de cerca de unos 40 puntos de venta de los que dispone repartidos la cadena de costa a costa del país. Mercado en el que Zara actualmente opera a través de 99 tiendas físicas, siendo la única de todas las cadenas de Inditex en contar con establecimientos operativos en todo el país. Un red que estaría actuando de palanca para la penetración del resto de las cadenas de la multinacional, en su caso a través exclusivamente del canal digital, y al que desde Zara han sumado ahora, con motivo de esta misma colaboración con Good American, una pop-up emergente en el condado de Los Ángeles.

Diseñada por Good American y producida por Zara

Deteniendo primeramente nuestra atención sobre el carácter de la propuesta, la colección ha sido diseñada por el equipo de Good American, mientras que la parte productiva habría recaído bajo la responsabilidad de Zara, encargándose de este modo la cadena de la fabricación de las prendas, a través de la red de proveedores de la que dispone tanto en Turquía como en los Estados Unidos.

Como reflejo de esta suma de fuerzas, nos encontramos con una colección de la que ambas firmas de moda han colaborado aportando y haciendo defensa de aquellos valores que consideran inherentes a su propia naturaleza y principios, convertidos así en los pilares centrales sobre los que se asienta la colección. Una propuesta que se significa de este modo por abogar tanto por esa inclusión corporal como por el uso de esos máximos estándares éticos y sostenibles que han llevado a Good American a lograr el ser certificada como empresa B Corp., al tiempo que desde Zara aportaban su experiencia en diseño y en producción, poniéndola al servicio de su compromiso por tratar de poner al alcance de un amplio público propuestas de moda sostenibles.

“La asociación de Good American X Zara permitirá promover la actual estrategia de Zara dirigida a proporcionar prendas de moda de vanguardia y más ropa sostenible para todos, así como el objetivo de Good American de brindar de una mayor representatividad e inclusión a la moda”, explican desde la propia cadena española. La colección logra así reunir “la experiencia de ambas marcas en materia de diseño, ajustes y tejidos sostenibles”, reuniéndolas aquí al rededor de una propuesta que se pondrá al alcance de los clientes de “todo el país”.

Prendas más sostenibles e inclusivas hechas con tejidos orgánicos y reciclados

Siguiendo con la esencia americana que sudan todas las propuestas de Good American, nos encontramos con una colección cápsula compuesta íntegramente en su totalidad por una serie de prendas confeccionadas en tejido denim. Una fibra que de manera tradicional se ha mostrado como una de las más contaminantes de la industria de la moda, debido principalmente al contaminante proceso de teñido por el que se elaboran las prendas denim, pero para cuya confección en esta ocasión se han implementado una serie de soluciones de corte sostenible.

De este modo, y junto a unas camisetas básicas en blanco y negro de manga corta y tirantes (35,90 dólares), encontraremos dando forma a esta cápsula a una nutrida variedad de prendas vaqueras, como un original mono entallado de manda corta (89,90 dólares), una camisa vaquera (69,90 dólares), o unos vaqueros de corte clásico con rotura en las rodillas, otros acampanados, de corte “relaxed”, de corte “skinny” y “skinny” con roturas en rodillas (69,90 dólares). Modelos todos ellos dirigidos a un público femenino, que han sido confeccionados a partir de materias primas más sostenibles como un algodón reciclado y un algodón orgánico, haciendo uso de fibras como el Tencel y mediante unos procesos de producción en los que se han implementado tecnologías de reducción del consumo de agua.

Además de estas características en defensa de esa sostenibilidad dentro de sus colecciones que buscan llevar a cabo de manera activa ambas firmas de moda, como respuesta a la naturaleza marcadamente inclusiva de Good American, todas las prendas de la colección cápsula han sido diseñadas en tallas de la XS a la 5XL. Una oferta de tallas más amplia de la que habitualmente ofrece Zara en sus colecciones, que habría supuesto un “reto” para la cadena, según se ha encargado de explicar Emma Grede, cofundadora junto a Khloé Kardashian de Good American, en declaraciones al medio estadounidense de noticias Wwd.

“Ha sido un trabajo de amor”, siendo esta “la primera vez que hacemos una colaboración importante”, apuntaba Grede; al tiempo que señalaba cómo el desarrollo de la cápsula ha sido “realmente un gran reto para Zara”, debido tanto a la inexperiencia de Good American a la hora de abordar una propuesta de tal envergadura, como frente a la decisión de “incluir tamaños más grandes” de los que la cadena de origen español habitualmente ofrece dentro de su catálogo de productos.

Pop-up store en Los Ángeles

Reforzando toda esa atmósfera por el gusto americano, por la sostenibilidad y por la inclusión que respira la cápsula, para el lanzamiento de la colección se ha recurrido a un plantel formado por algunas de las modelos “curvy” más demandadas del momento, entre las que se incluyen nombres como los de Precious Lee, Devyn Garcia, Georgia Palmer, Quannah Chasinghorse, Luca Biggs, Eden Joi y Kayako Higuchi.

Esta reunión de modelos inclusivas no solamente se han encargado de poner cara a la campaña de promoción de esta colección cápsula, sino que su rostros también han pasado a protagonizar el espacio de esa nueva pop-up emergente que Zara a abierto en Los Ángeles con motivo de este lanzamiento. Un punto de venta temporal ubicado en el 8175 de Melrose Avenue, en West Hollywood, que permanecerá abierto de 11 de la mañana a 19 de la tarde hasta el próximo 13 de mayo. Tiempo en el que todas las clientas y apasionadas de ambas marcas podrán acceder a su interior, para descubrir de primera mano las piezas de esta colección, y para participar de una experiencia de escaneo corporal en 3D de sus propios cuerpos. Una iniciativa desde la que se les facilitará la información para que puedan saber qué estilo y qué talla es el que mejor les puede sentar atendiendo a su forma corporal, y que se ha decidido poner en práctica siguiendo con el mensaje a favor de la inclusión corporal que se defiende desde esta cápsula.

Inditex, a la conquista del mercado americano

Mientras que para Good American con esta cápsula se permiten la ventaja de elevar su perfil como marca americana, pensada y dirigida al público norteamericano, es precisamente ese mismo e idéntico fin el que perseguirían desde Zara, sumando su nombre y abriendo las puertas de sus tiendas a una firma de moda que los consumidores estadounidenses entienden como propia. Una decisión tras la que se encontraría la clara estrategia puesta en marcha por Inditex para seguir consolidando su presencia en el país norteamericano. Un mercado altamente codiciado por las principales marcas y cadenas de moda internacionales, tanto por el volumen que encierra, como por el potencial de crecimiento que recoge y la seguridad que ofrece frente a otros mercados como el chino o el ruso.

A pesar de no contar más que con 99 tiendas físicas en el país, todas operando bajo el paraguas de Zara, desde Inditex aseguraban, coincidiendo con la publicación de sus resultados anuales relativos a su último ejercicio fiscal de 2021, que Estados Unidos había pasado ya a convertirse en el principal mercado de la compañía, únicamente por detrás de España. Un papel que hasta entonces venía ocupando una Federación Rusa en la que Inditex sumaba en contra hasta 502 tiendas, todas ellas cerradas temporalmente desde el pasado 5 de marzo de 2022, consecuencia de la paralización temporal de todas las operaciones en Rusia que Inditex decidía poner en práctica en respuesta a las circunstancias derivadas de la guerra que está teniendo lugar en Ucrania.

Con su negocio paralizado en Rusia, y con los buenos índices de facturación que, aseveran, estaría la compañía recogiendo en los Estados Unidos a través principalmente del canal online, es como nos encontraríamos con los principales motivos que han conducido a la multinacional española a lanzarse finalmente a la conquista del mercado estadounidense mediante una colección cápsula que se presentaría solamente como la primera de muchas iniciativas que se pondrán en marcha con idéntico fin.

Una batalla que deberán de librar frente a no pocos operadores tanto nativos como internacionales que igualmente pugnan por hacerse con un trozo de tan codiciado pastel, entre ellos una Shein cuya aplicación móvil llegó a ser la más descargada de todo el país, a fecha de mayo de 2021, por encima de la de Amazon, y cuya página web ya se sitúa entre las favoritas de las compras online de los jóvenes estadounidenses. Siendo así una meta que desde Inditex confían no obstante en lograr, valiéndose de la penetración con la que cuenta Zara en los Estados Unidos, un mercado que estiman con un elevado potencial para el crecimiento de la compañía.