Imagina ser: Diseñadora de Moda y salir al mundo laboral
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El tejido industrial de la moda española está compuesto por alrededor de unas 19 000 empresas. Ocupa el quinto puesto en Europa después de Italia, Alemania, Reino Unido y Francia, y representa el 2,9 por ciento del PIB y el 4,3 por ciento del empleo nacional.
Esto deriva en una gran variedad de alternativas para aquellas personas que deciden participar del sector textil, tanto en España como el resto del mundo, pero existe una gran mayoría que a la hora de escoger su camino, sucumbe al atractivo de dedicarse al diseño de moda.
Desde FashionUnited hemos querido compartir las distintas experiencias de tres jóvenes que acaban de graduarse y están dando sus primeros pasos en el mercado laboral.
Carmen Del Toro tiene 24 años, se ha formado en la Escuela Sevilla de Moda, un Centro de Enseñanzas artísticas superiores de Diseño especializado en Moda y Gráfico. Ha realizado dos prácticas, unas de carácter curricular en la marca italiana emergente Defaïence y unas segundas extracurriculares con Iris Van Herpen, la diseñadora de moda holandesa conocida por fusionar la tecnología con la artesanía tradicional de Alta Costura.
“A pesar de ser muchísimas horas, estaba realizando un trabajo que me encantaba, y sentía que cada vez me daban más responsabilidades. Vas viendo el resultado de lo que vas haciendo día tras día y eso te mantiene motivado a seguir”
Del Toro cuenta que durante sus prácticas tuvo la oportunidad de trabajar en la parte digital de los diseños, lo que le permitió conocer un mundo que le encantaba y en el que ha conseguido una experiencia que actualmente le anima a aplicar para puestos donde pueda seguir desarrollándose en este campo.
Al estar de prácticas, explica que tenía más o menos las mismas condiciones laborales en ambos países, pero que en Holanda la carga de trabajo y responsabilidad ha sido mucho más intensa al tratarse de una marca de Alta Costura y haber estado participando directamente en su colección para la Haute Couture Fashion Week de París. Lo que más ha notado es que hay muchas más oportunidades laborales en Holanda. "En general he visto que confían más en la gente joven, ya entrando a comparar también con España".
Julia González estudió con Carmen en la escuela sevillana y posteriormente coincidieron en Defaïence, experiencia en prácticas sobre la que ambas comparten el que, aunque estaban más centradas en el diseño de las colecciones, pudieron participar de manera interdisciplinar en todos los procesos de la marca.
Hace unos meses, Julia decidió lanzarse a dar forma a una serie de proyectos propios —como su propia firma, GONA— algo que considera ha sido fundamental para su desarrollo personal, pero que “realmente no se valora en el currículum por parte de las empresas”.
Demasiados años de experiencia y vacantes que “se cubren por contactos”
Julia González considera que la búsqueda de trabajo en el campo del diseño de moda puede llegar a ser “frustrante” para los recién graduados, pues suelen pedir muchos años de experiencia y la mayoría de vacantes denuncia que, “se cubren por contactos”.
Ella considera que tiene las cualidades que piden en muchos puestos, que ha ganado la experiencia desde una perspectiva transversal, pero que nadie le ofrece la oportunidad de demostrarlo. Esto le ha llevado a decidir continuar formándose con un Máster en diseño 3D y metaverso, actualmente en auge, mientras trata de encontrar unas prácticas, “a ser posible remuneradas”, que pueda compaginar con sus estudios de posgrado.
Del Toro considera, por su parte, que sí hay oportunidades para los recién graduados, pero que también existe a día de hoy mucha competencia en el sector. "Hay que trabajar mucho y estar en constante movimiento, tener idiomas es fundamental y no tener miedo a aplicar a puestos con muchas responsabilidades aunque se tenga poca experiencia”, aconseja explicando que, aunque ella personalmente no ha llegado a tener experiencia en “el puesto de sus sueños”, ha aprendido algo de cada trabajo e incluso se ha sentido un paso más cerca del sitio al que quiere llegar.
En esto último coincide con González que comparte como “no pensaba que viviría ciertas experiencias, en primera persona, tan rápido, pero también pensaba que estaría trabajando ya y no ha sido así, pues al terminar de estudiar hay un proceso de búsqueda, de volver a encontrarte con lo que te gusta y de ahí nace la frustración de que no te contraten en lo que has estudiado, cuando sería de gran ayuda, especialmente al principio”.
Considera que durante la etapa académica “no solo no nos preparan para el rechazo, sino que tampoco para saber cómo aplicar en un puesto. Si tu propósito es emprender, ya si que no te enseñan nada a nivel empresarial. En Andalucía, a diferencia de otras comunidades españolas, nuestros estudios de Diseño no están considerados como grado universitario lo que a veces cierra puertas”.
“Para mi fue un golpe de realidad el crear mi propia marca ya que sentía que no estaba formada en muchos aspectos”
Lucía terminó de estudiar Diseño de Moda y tras trabajar varios años como dependienta en una tienda de ropa, para hacerse con algunos ahorros, se lanzó a crear su marca Sissú a la que se dedica en tiempo completo. En ella realiza diseños únicos para sus clientes, según el tipo de evento, enfocándose principalmente en las invitadas y el mundo flamenco. Su atelier se encuentra en Dos Hermanas, Sevilla.
Cuenta que durante sus prácticas experimentó una manera de entender la moda que no compartía, lo que le impulsó a montar su propio negocio valiéndose de la experiencia adquirida tras participar en varios backstages, de distintas marcas de moda, así como en diferentes desfiles, presentando colecciones que posteriormente ha podido llevar a la venta. Su último trabajo fue como ayudante en el desfile crucero de Dior en Sevilla.
Si también pudiera hacer la profesión “a su medida”, dice que le encantaría seguir siempre con la línea que ha empezado: “creando y diseñando ropa exclusiva para mis clientes, ya que me encanta conectar con ellos, adentrarme en sus cabezas y fusionar sus gustos con los míos aportando siempre en cada diseño mi esencia”, aunque le gustaría sacar colecciones de invitada y alguna línea streetwear en un futuro.
Comparte con FashionUnited que no considera que el sistema educativo le haya preparado para salir al mundo laboral en toda su plenitud, debido a que una vez terminó Diseño de Moda, tuvo que seguir formándose a través de distintos cursos e investigar mucho para llegar a saber cómo crear su propia marca a nivel legal.
Por su parte, Carmen echa en falta en el sistema educativo, "estar un poco más formada en el ámbito digital”. “Muchas marcas trabajan con programas avanzados que en ningún momento aparecieron en mi plan de estudios y creo que es una gran oportunidad para las nuevas promociones porque es algo relativamente nuevo, que puede diferenciar nuestro currículum y abrirnos muchas oportunidades profesionales".