Moda chilena: El diseño de autor en el país del retail
cargando...
Según datos publicados por el diario digital “El mostrador”, Chile es el primer país sudamericano en comercio de indumentaria y en los últimos cinco años los chilenos han aumentado un 80 por ciento el consumo de ropa, pasando de comprar 13 a 50 prendas por año.
Estas cifras podrían ser buenas noticias para la industria de moda local, sin embargo, el retail, el fast fashion, la importación y la fuerte presencia de marcas extranjeras afectan significativamente la posibilidad de crecimiento del mercado de indumentaria. Para la diseñadora Loraine Holmes, que ya se ha hecho un lugar en el ámbito de la moda emergente, uno de los principales desafíos tiene que ver con el posicionamiento: “Es difícil lograr visibilidad y competir con el retail, que es tan fuerte en Chile”.
En los últimos años, el diseño de autor ha venido creciendo de a poco, pero a paso firme, dando lugar a nuevos creadores, organizaciones y miembros de la industria en pos de construir un nuevo escenario.
Panorama de la moda chilena
Chile tiene una fuerte presencia de marcas internacionales en los principales centros comerciales, pero las firmas locales no abundan, ni cuentan con la misma suerte. Tampoco hay un evento de magnitud donde sólo se presente moda nacional. Sin embargo, se ven movimientos de ciertos sectores por hacer crecer la industria. “Siento que cada vez hay más interés en la moda, más allá del público en general que creo que no hace una diferenciación consciente entre las marcas de autor nacionales y las que no lo son” contó Lupe Gajardo, la primera diseñadora chilena en presentarse en la Semana de la Moda de Nueva York y que en febrero estará mostrando su propuesta en el International Fashion Showcase de Londres.
Gajardo pertenece a Moda Chile, una asociación gremial no gubernamental que reúne a las principales marcas independientes. “Nos hemos enfocado en intervenir en políticas públicas, tener presencia en ferias y sumar visibilidad”, explicó.
Por su parte, el organismo gubernamental ProChile ha apoyado en los últimos años a la moda chilena y ha permitido que algunos diseñadores se presenten en diferentes lugares como Japón, Francia y Reino Unido.
El país no cuenta con un calendario de moda: “Orgánicamente en marzo muchas marcas independientes lanzan colección y entre agosto y septiembre se presentan las propuestas de primavera-verano, pero todo se da individualmente, no hay un gran evento. Los pocos que hay como la Mercedes Benz Fashion Week, dura dos días y participan solo tres marcas chilenas, todo el resto es retail”, dijo Gajardo.
Otro de los obstáculos es la falta de materias primas. Para Gajardo este es un punto clave para el desarrollo: “Compro casi todos mis materiales afuera y para entrarlos al país termino pagando entre un tercio y la mitad del costo”. Como alternativa, algunos diseñadores optan por ponerle su propio sello a los materiales que consiguen localmente, interviniéndolos y así logran una diferenciación.
En cuanto a la calidad y el comercio justo que se está dando globalmente, Chile no se queda afuera: “Creo que las generaciones jóvenes tienen una mayor consciencia y les preocupa qué hay detrás del proceso de producción de la ropa. Le dan un valor agregado y eso se ve traducido en la industria”, comentó Holmes.
Todavía hay trabajo por hacer en Chile y, aunque para la gran mayoría el tema de la moda sea algo ajeno, hay talento e intención por hacer crecer la industria.
Encuesta a la moda de autor
A fines de 2016 la plataforma multidisciplinaria “Matriz Moda” realizó la encuesta “Diagnóstico económico de la moda de autor en Chile” con el fin de buscar visibilidad y mostrar su potencial dentro del mercado.Participaron anónimamente 95 marcas y estos son algunos de los datos que recogieron:
- La moda de autor chilena está dominada por mujeres de entre 31 y 40 años, con estudios universitarios o técnicos que cumplen varias funciones al mismo tiempo.
- Por la diferencia en los ingresos, el 88,2 por ciento de las marcas se reconoce como micro empresa, el 10,8 se identifica como pequeña y 1,1 como mediana. Tomando el nivel más alto de facturación de estas categorías se puede decir que el diseño de autor le aporta a la economía unos 22 millones de dólares.
- El 84 por ciento de las marcas dice producir con técnicas artesanales y el 65,5 no utiliza ninguna tecnología tipo impresión, corte y/o patronaje digital.
- El 87,2 por ciento de los consultados dijo encargarse personalmente del área financiera de su marca. La mayor concentración de gastos está en la producción (47,4 por ciento), insumos (40 por ciento) y comercialización (10,5 por ciento).
- El 72, 6 por ciento posee taller propio. Los principales problemas de aquellos que trabajan con proveedores son la falta de variedad (48,9) y en el caso de los servicios (moldería, confección, estampados, etc), la mayor carencia tiene que ver con la calidad (30,1) y los cumplimientos (20,5).
- En cuanto a la comercialización, un 86,3 por ciento de los diseñadores son los que se encargan del proceso. Las redes sociales tuvieron un 29,5 por ciento de preferencia a la hora de la distribución, seguidas por la tienda propia 26,3 por ciento y el showroom 22,1 por ciento.
- El 22,1 por ciento de las marcas encuestadas exporta. El 80 por ciento de ellas vende en el exterior entre el 1 y un 20 por ciento de su producción total anual. Los principales destinos son la Unión Europea (34,6 por ciento), Norteamérica (26,9 por ciento) y Sudamérica (15,4 por ciento).
Fotos: Jose Moraga para Lupe Gajardo, Loraine Holmes
Fuente: www.matrizmoda.cl