Moisés Nieto, homenaje a la siesta

En uno de los distintos encuentros que Antonio Gala llegó a mantener a lo largo de su vida con el periodista Jesús Quintero, quien precisamente fallecía tristemente este pasado 3 de octubre, el poeta y dramaturgo respondía, a la no poca inocente pregunta de que qué es lo más inteligente que se puede hacer en esta vida, que el “salir de esa extraña y monótona esclavitud” a la que nos hemos terminado atando con “esta especie de laberinto en que nos han metido” y del que nos apresuraba a tratar de escapar. Unas palabras que pronunciaba en 2018, pero que siguen circulando aún a día de hoy de boca en boca, y de mensaje en mensaje a través de las redes sociales, y de las que bien se desprenden todos y cada uno de los aromas, a sosiego, a calma, que el diseñador jiennense Moisés Nieto ha buscado imprimir sobre su última colección. Una propuesta ideada de cara a la próxima temporada Primavera/Verano de 2023, que se muestra como un claro homenaje a la siesta como sinónimo, tan español y oriundo, como de ese lujo que resulta del poder disfrutar del tiempo para el descanso. Un lujo cuya valor es imposible de comprar, ni vender.

Diseñada precisamente bajo un título de “Siesta” que no deja lugar para equívocos, el diseñador, una de las principales voces de la nueva escena de la moda española, presentaba esta última colección una vez más bajo el paraguas de su firma de modas homónima, fundada en el año 2011, a lo largo de un desfile que tenía lugar en Madrid este miércoles 5 de octubre. Un evento de presentación que se desarrollaba desde el interior del “Plató Cenital”, espacio multifuncional ubicado en la madrileña calle de Santa Hortensia que el jienense lograba transformar, de la mano de Elena Suárez&Co., atelier especializado en diseños florales, y de las fragancias de la casa británica Jo Malone, en una suerte de veraniego jardín capaz de acunar largas sesiones de siesta.

Una ambientación inmersiva, cuya atmósfera se encargó de completar la “experiencia sonora” creada para la ocasión por la cantante Zahara, titulada “Una siesta en Úbeda”, que pudieron disfrutar de primera mano personajes tan conocidos como la actriz Marta Hazas, la artista Lara Lars o la modelo internacional Laura Ponte. Solamente algunos de los nombres que se encontraban entre los asistentes a la presentación de una colección, cuya esencia el propio diseñador resume en unas breves líneas de la obra “El don de la siesta”, ensayo del murciano Miguel Ángel Hernandez publicado por Anagrama:

“Recuerdo los veranos. La casa se oscurecía y me prohibían salir a molestar a los vecinos. Las persianas se bajaban y el volumen del televisor se reducía al mínimo, apenas un rumor. Era un momento sagrado que aún no comprendía”. Miguel Ángel Hernandez en “El don de la siesta” (Anagrama, 2020).

Entre sábanas atadas y nudos que se deslizan

Haciendo honor al leitmotiv de la colección, el desfile no arrancó hasta pasadas las 18 de la tarde, dando tiempo así a que todos los invitados a la presentación tuvieran tiempo, de ser así el caso, de desperezar sus dedos y de zafarse de las firmes sábanas que les habrían estado dando cobijo durante una de sus posiblemente últimas siestas del verano. Un elemento tan atado a lo cotidiano como a la intimidad de nuestros hogares, que se convierte aquí, y de la mano de Nieto, en principio y fin del imaginario creativo sobre el que se sostiene esta “Siesta”, con la que el jienense viene a subrayarnos ese lujo que supone el poder parar y poner freno a los ritmos acelerados de la vida contemporánea, para escapar a través de ella, y aunque solo sea por un instante, a este jardín de mansedumbre y de esa “vida que no es la nuestra” de “monótona esclavitud”, tal y como la describía Gala.

Como fruto de un proceso creativo cuyo origen el propio diseñador sitúa en unas sábanas “vintage” que descubrió en un mercado local de México, y cuyo patrón le sirvió de inspiración para idear uno de los estampados que se encargan de dar color a la propuesta, nos encontramos con una colección asentada sobre una paleta cromática a base de blancos, malvas, melocotones, rosas y azules en acentos pastel, mientras que intensos marinos, marrones y amarillos se encargan de dar profundidad a las prendas. Unos modelos que comparten sus mismas líneas fluidas, pero al mismo tiempo ajustadas, en lo que se manifiesta como una referencia a la imagen grabada en el imaginario del diseñador de unas sábanas que se aprietan, sueltan y retuercen contra el cuerpo. Una instantánea muy potente que nos hace nuevamente viajar hasta esas largas siestas propias del periodo estival, hasta esos momentos donde el tiempo parece detenerse en una pausada y apetecible apatía, imagen desde la que Nieto construye los distintos vestidos, tipología de prenda que se eleva como pieza clave de esta colección, compuesta por un total de 24 looks en los que, más allá de esas sábanas, no faltan las referencias extraídas de elementos igualmente vinculados a la siesta y al descanso, como unos pijamas revisitados en forma tanto de vestidos como de conjuntos de dos piezas. Terminándose de completar la colección, y el desfile, con la presentación de una nueva serie de complementos, de entre los que sobresalían unos bolsos confeccionados artesanalmente a mano, y en España, a partir de sábanas de estampados florales, o unos bolsos y complementos, entre collares y pulseras, construidos a partir de cuencas de cristal de colores.

“Quería trasladar a las prendas de esta colección la sensación que uno experimenta con las sábanas durante las largas siestas de verano”, rememorando esos momentos en los que “las sabanas se enmarañan” y “se arrugan”, en lo que aquí da lugar a unas prendas en las que “se forman nudos y asimetrías intencionadas que nos devuelven a esa lentitud y sensación embriagadora que acompaña el despertar”, explica el propio diseñador a través de unas declaraciones que nos hacen llegar desde Moisés Nieto. Unas declaraciones ofrecidas con motivo de la presentación de una colección, desde la que el jienense continúa profundizando en esos mismos valores, por la sostenibilidad y por una manera “slow” y pausada de enfrentar la moda, que viene marcando su trayectoria dentro de la industria, en una apuesta que ya le ha llevado a emprender proyectos como ese “Google de artesanos” que es “La Hacería”, plataforma puesta en marcha por el diseñador a mediados de noviembre de 2021.

“Creo firmemente en la compra lenta y consciente, en la construcción de un armario cada vez más pequeño y controlado”, defiende a este respecto Nieto. “Igualmente”, añade el diseñador español, “es para mí muy importante la vuelta a las raíces, el concepto de parar y desconectar para reconectar”. “Estamos inmersos en un tiempo acelerado que hace que nos veamos abocados a un ritmo trepidante que nos afecta y nos empuja a la confusión y el caos”, esgrime. Un tiempo al que, sostiene, “debemos ponerle remedio, porqué no también a través de la moda”.