Zara presenta su nueva colección “Atelier” (con el vestido de Marta Ortega del desfile de Dior)

Demostrando que no fue flor de un día y que son firmes sus intentos por marcar tendencia dentro del mundo de la moda, yendo mucho más allá del mero hecho de vender ingentes cantidades de ropa, la cadena de moda Zara, buque insignia y principal marca comercial del gigante español Inditex, acaba de lanzar al mercado su nueva colección “Atelier”. La segunda propuesta de esta línea que termina viendo la luz, desde su sorpresivo primer lanzamiento a comienzos del pasado diciembre de 2021. Un momento en el que terminaban por lanzarse las piezas de abrigo de aquella primera colección, al igual que la presente confeccionada en edición limitada, y de la que todavía quedan unidades disponibles desde la tienda online de la cadena.

Compartiendo con su hermana mayor su naturaleza más atrevida y enfocada a tratar de poner en valor los procesos artesanales, como el bordado, las incrustaciones o la estampación de motivos, así como los juegos de volúmenes, formas y siluetas que hacen de la moda una auténtica disciplina artística y creativa, esta segunda colección “Atelier” llega compuesta íntegramente por vestidos. Una serie de un total de seis diseños exclusivos y completamente diferentes, confeccionados en los talleres de los proveedores de Inditex de Marruecos y la India, y de entre los cuales no ha podido dejar de pasar desapercibido el vestido tipo kaftán, en color nude-rosa apagado y con incrustaciones metálicas. Una suerte de túnica, recubierta de otra suerte de cota de malla metálica, y modelo que fácilmente puede reconocerse como el que llegó a lucir Marta Ortega, hija de Amancio Ortega y actual presidenta no ejecutiva de Inditex, para asistir al desfile que organizó la casa francesa Dior el pasado 16 de junio en Sevilla para la presentación de su colección Crucero 2023.

Entre bordados, abalorios… y el kaftán de Marta Ortega

Con precios que oscilan desde el modelo más económico, a 199 euros, a los tres diseños intermedios, a 249 euros, y los de rango más elevado, a 299 euros, la colección se destaca por situarse en la horquilla más elevada de la oferta comercial de Zara. Una cadena cuyo catálogo de vestidos puede fácilmente oscilar desde los 9,95 a los 30 y 50 euros, desde la que entenderían como justificado el elevado precio de estos diseños en la riqueza de los materiales y de los procesos seguidos para su confección, así como en lo singular y única en la que resulta su producción.

Entrando ya a desgranar los detalles de estas piezas tan particulares, nos encontramos primero con un vestido Jacquard (199 euros) de cuello redondo y sin mangas, que llama poderosamente la atención por el conjunto de estampados, en “ricos tejidos de jacquard dreapeados”, y superpuestos, que se encargan de dar cuerpo a la parte central e inferior de la pieza. Prenda que, para completar ese aire oriental de la pieza, termina presentando una cinta de atado a la altura de la cintura como último detalle ornamental.

Como segunda pieza, nos encontraríamos con ese vestido tipo kaftán (299 euros) que se encargó de presentar y de lucir, antes que nadie, la presidenta del Grupo Inditex. Una pieza de mangas asimétricas y cuello redondo con cinta de atado, con forro interior y parte delantera, al completo, y trasera, mitad de espalda, recubierta con esas incrustaciones metálicas en forma de malla.

Mostrándose como una de las piezas más llamativas de la colección, nos encontramos con un vestido estampado y recubierto de piezas de strass (249 euros). Un modelo “joya”, tal y como lo describen desde Zara, multicolor, confeccionado en efecto parche, con mangas abullonadas y recubierto en cuello y cintura con piezas brillantes multicolores.

Como uno de los modelos más serenos de esta colección, nos encontraríamos con el vestido “Tachas” en edición limitada (249 euros). Un modelo que, a pesar de lo brusco que pueda resultar su nombre, se presenta como una suma de elementos superpuestos, armoniosamente equilibrados, todos ellos en un veraniego y apaciguador color blanco roto. Una armonía plácida, cuyo contra punto se encarga de poner el mar de tachuelas metálicas que se encargan de decorar la parte superior de los tirantes de la pieza. Unos elementos que, lejos de romper la armonía del conjunto, vienen a dotarlo de una gran fuerza y presencia, pareciendo querer transmitir el mensaje de que delicadeza no es ni mucho menos sinónimo de debilidad. Sin duda, una de las piezas más interesantes de esta colección “Atelier”.

En un tono mucho más étnico, pese a no poder asegurar a ciencia cierta de qué rincón del mundo podrían venir las influencias que han permitido su confección, nos encontraríamos con el vestido “Bordados” (249 euros). Un prenda de corte oversize confeccionada en color crudo, con bordados geométricos y de inspiración animal en rojo y granate.

Cerrando ya esta colección en edición limitada, nos encontramos con el vestido “Abalorios” (299 euros). Una pieza parece que directamente venida del fondo del mar, confeccionada como una suma de una falda tipo pareo, en azul océano, drapeada y con una abertura en su parte frontal, y un cuerpo superior en un intenso y llamativo naranja coral. Tono que termina completándose de destellos en amarillos, plateados y una infinidad de distintos naranjas y ocres, colores que encontremos deslumbrándonos desde las piezas de strass, los abalorios y las lentejuelas que se encargan de recubrir por entero la superficie superior del vestido.