La pandemia: un cambio en las tendencias de consumo

Madrid- Las tendencias de compra suelen evolucionar a lo largo de todo el año, sin embargo, el primer trimestre de 2020 ha sido mucho más decisivo y las circunstancias sanitarias, económicas y sociales han dado un giro de 180º al panorama financiero en todo el mundo.

Como era de esperar, las prioridades en cuanto a gasto y consumo se han visto afectadas durante el confinamiento

Según el último estudio realizado por Bnext (empresa española financiera de nueva generación),, los hombres de entre 18 y 35 años eran los que más productos y servicios de retail consumían antes del estado de alarma, y destinaban un 9 por ciento de sus presupuestos a estos conceptos, frente al 4 - 5 por ciento destinado por las mujeres del mismo grupo de edad.

Tras la declaración del estado de alarma, ambos géneros aumentaron el gasto en retail: los hombres de entre 18 y 24 años pasaron a destinar un 15 por ciento de su presupuesto, las mujeres de la misma edad, un 6 por ciento. Los hombres de entre 25 y 30 años destinaron, entre el 14 de marzo y el 21 de junio, un 14 por ciento de su presupuesto, frente al 7 por ciento destinado por las mujeres de la misma edad. Los hombres de entre 31 y 34 por ciento.

Los jóvenes adultos gastan menos en moda

El grupo comprendido por los jóvenes de entre 31 y 35 años es el que menos invertía e invierte en moda, pero es, por el contrario, el que más presupuesto destina a alimentación y restauración. Antes de la pandemia, los hombres de este grupo de edad destinaban un 12 por ciento de su presupuesto a estas partidas. Durante el estado de alarma, aumentaron el gasto hasta alcanzar el 15 por ciento de su presupuesto total. Las mujeres de entre 31 y 35 años, que destinaban un 9 por ciento de su presupuesto a las mismas partidas antes del 14 de marzo, destinaron el mismo porcentaje durante el confinamiento.

Por su parte, los jóvenes de entre 18 y 24 años, disminuyeron su gasto en alimentación y restauración tras el confinamiento, probablemente porque, además de no poder realizar salidas con amigos, cubrían sus necesidades de gasto en estas partidas gracias a la inversión de otros miembros del núcleo familiar en ellas.

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